Sacyr consigue un beneficio semestral de 412 millones gracias a la venta de Itínere
Sacyr Vallehermoso obtuvo un beneficio neto de 412,5 millones de euros en el primer semestre del año, frente a las pérdidas de 100,6 millones de euros obtenidas en el mismo periodo de 2008, por las plusvalías obtenidas de la venta de Itínere.
Desde el presente ejercicio el grupo sólo se anota los dividendos cobrados por la participación del 20% que tiene como primer accionista de Repsol YPF (128,2 millones de euros) y, pese a consolidar la participación, no suma el porcentaje que le corresponde de los beneficios de la petrolera.
Además, el resultado de Sacyr incluye una provisión de 141,2 millones correspondiente a las cuentas a cobrar de clientes que atraviesan dificultades económicas y otras facturas.
La cifra de negocio del grupo que preside Luis del Rivero creció un 24,1% entre enero y junio, hasta los 3.302 millones de euros, en tanto que el beneficio bruto de explotación (Ebitda) cayó un 30,9%, hasta los 238,2 millones de euros, por la menor aportación del negocio constructor e inmobiliario.
La compañía subrayó que los resultados reflejan la labor que realiza para adaptarse a las actuales condiciones de mercado, desde el punto de vista de negocio y de estructura financiera. En esta estrategia se enmarca la venta de su ex filial de concesiones Itínere y las ventas de activos inmobiliarios de Vallehermoso y de Testa realizadas en el primer trimestre.
Este hecho, además de impulsar los resultados, ha permitido a Sacyr reducir un 20,1% su deuda neta, hasta los 11.590 millones de euros, frente a la de 14.512 millones de cierre de 2008, y los 18.259 millones de junio del pasado año. La compañía, que aún tiene pendiente de vender un 9% de Itínere, mantiene su previsión de cerrar el ejercicio con un endeudamiento de unos 11.000 millones, según explicó la directora general corporativa del grupo, Ana de Pro.
Buscan igualar las cifras de 2008
Por áreas de negocio, la de construcción, primera fuente de ingresos del grupo, redujo un 12,5% su facturación, hasta los 1.683 millones, y mermó un 24,2% su aportación al Ebitda.
No obstante, el grupo, que lidera el consorcio que recientemente se hizo con la ampliación del Canal de Panamá, confía en elevar la actividad constructora en los que resta del año, para que a cierre de ejercicio muestre un "empate" con las cifras de 2008, según indicó De Pro durante la presentación a analistas.
En este sentido, el consejero delegado del grupo, Manuel Manrique, mostró su confianza en que la licitación de obra pública por parte del Ministerio de Fomento "recupere el ritmo de crucero de años anteriores" en la segunda mitad del año, y apuntó además a la intención del nuevo ministro, José Blanco, de lanzar un plan extraordinario de obra pública.
En cuanto al negocio inmobiliario, la rama de promoción (Vallehermoso), duplicó (+118%) sus ingresos hasta junio, que sumaron 1.160 millones, gracias a la escrituración de las viviendas vendidas en años anteriores y a ventas de suelo por 770,9 millones. Por contra, Testa, filial patrimonial, redujo un 2,7% su facturación, hasta 132 millones, como consecuencia de los activos vendidos en el primer trimestre.
Por su parte, la cartera de concesiones con que cuenta tras vender Itínere facturaron 48 millones, y Valoriza, la rama de servicios, generó ingresos por 429 millones, un 11,6% más.