Empieza la 'staycation'
Hace unos días la editorial del diccionario líder en EE UU, Merriam-Webster, decidió incorporar a su última edición 100 palabras nuevas. Una de ellas empezó a usarse en 2005 de forma marginal y de forma general en 2007. Este año se encumbra popularmente: staycation. Nacido de la unión de las palabras stay y vacation, el vocablo se usa para describir las vacaciones que se pasan en casa o alrededores cercanos de la vivienda habitual. Y por imperativo económico y práctico, se ha puesto de moda.
Tanto es así que hace unas semanas, antes de que se imprimiera en un diccionario, el locutor de la radio pública en Nueva York, Brian Lehrer, hizo un programa en el que proponía a los oyentes que aportasen datos sobre restaurantes y zonas favoritas de la ciudad en los que hubiera una fuerte influencia extranjera. El objetivo es que los ciudadanos se sugirieran entre sí destinos "exóticos" dentro de la propia ciudad en caso de que estuvieran de staycation. En una ciudad tan diversa y activa como Nueva York, no es un revés quedarse en casa debido a la forzada frugalidad con la que afrontan los americanos el veraneo.
Algunas agencias ya comercializan viajes de un día o dos a los alrededores en paquetes de staycation y se prevé que este año haya muchas visitas a parques nacionales o actividades al aire libre. Es la razón por la que aerolíneas y hoteles están ya ofreciendo interesantes descuentos de última hora en un año que se prevé que sea flojo en reservas y ligero en las carreteras. Igual que hizo Lehrer, algunos diarios locales proponen actividades para ahuyentar la rutina en los días libres.
Este tipo de vacaciones locales se instala en las vidas de unos ciudadanos que normalmente tienen pocos días para disfrutar del descanso laboral. EE UU es uno de los países desarrollados con menos vacaciones al año, una media de 13 días comparados con los 38 de Francia o los 30 de España, según un estudio de la agencia de viajes online Expedia. Este informe especifica, además, que un 34% de los trabajadores americanos no tiene pensado tomarse enteras las vacaciones, un salto importante con respecto a 2008 en el que este porcentaje era del 31%. Y no hay una desconexión total. El año pasado un 24% estuvo pendiente de forma regular de su contestador automático y del correo electrónico.
Chase, hizo público otro estudio en el que daba cuenta de cómo el ahorro también va a ser fundamental en las vacaciones en casa y cómo hay cosas que ni un cinturón ajustado puede cambiar. Según el estudio de este banco, el 64% de los americanos se va a comprar una barbacoa o se hará socio de una piscina y el 70% de los que tenían planeado ir de camping lo harán. Y para pagar por ello están determinados a rebajar sus gastos por ejemplo en el cuidado de sus jardines, el uso del aire acondicionado, las reparaciones o la gran limpieza de la casa. Dos tercios de los entrevistados más jóvenes aseguran que este año usarán más la bici en trayectos cortos que el coche para no gastar demasiado en gasolina.
Desde un punto de vista más romántico que dramático, las actividades del veraneo frugal se presentan como una vuelta "a la vida más simple" y al concepto del "hágalo usted mismo". Son los principios para disfrutar una staycation feliz.