Reino Unido actuará contra los bancos si éstos cobran intereses excesivos
El ministro británico de Economía, Alistair Darling, instó hoy a los bancos a la concesión de más créditos, pero advirtió de que tomará medidas si cobran intereses excesivos a las pequeñas y medianas empresas (pymes).
En declaraciones al programa Andrew Marr Show de la cadena pública británica BBC, Darling subrayó su preocupación ante una información de la web de información financiera Moneyfacts que asegura que los bancos británicos han casi cuadruplicado los intereses que cobran por los préstamos en los últimos meses.
Las entidades, según Moneyfacts, han elevado los intereses pese a que el precio del dinero se sitúa actualmente en el Reino Unido en un histórico mínimo del 0,5%.
El ministro, que tiene previsto reunirse este lunes con líderes de la banca, se declaró "muy preocupado por lo que los bancos están haciendo con las pymes en este país".
El "Chancellor of Exchequer" recordó a los bancos que el Gobierno no rescató al sector durante la crisis crediticia "como un acto caritativo", sino para que restauraran los niveles de crédito.
La Asociación Británica de Banqueros defendió el aumento de los intereses asociados a los préstamos con el argumento de que ahora afrontan costes "sustancialmente" mayores.
Sin embargo, el portavoz de la Federación de Pequeñas Empresas, Stephen Alambritis, indicó que "es muy importante que el señor Darling mantenga controlados a los bancos para garantizar que prestan dinero a las empresas a intereses justos".
En cuanto a la situación de la economía nacional, el titular de Economía reiteró su proyección de que la recuperación empezará en 2010 con un modesto crecimiento.
El producto Interior Bruto (PIB) del Reino Unido se contrajo un 0,8 por ciento entre abril y junio, con lo que acumula una caída del 5,8% en el último año, el mayor retroceso desde que comenzara a elaborarse la estadística en 1955.
Según informó esta semana la Oficina Nacional de Estadísticas (ONS), la caída del segundo trimestre del año supera las previsiones de los analistas, que esperaban una contracción del 0,3 por ciento, y rubrica el quinto descenso consecutivo de la economía nacional.