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Latinoamérica

La crisis aprieta, pero no ahoga en América Latina

Rato reclama más incentivos a la inversión exterior

La crisis aprieta, pero no ahoga en América Latina
La crisis aprieta, pero no ahoga en América Latina

En un entorno de recesión global no conocido desde la Segunda Guerra Mundial, Latinoamérica no está exenta de sufrimiento, pero esta crisis no tendrá los impactos catastróficos a los que la región está acostumbrada. Es la conclusión del seminario organizado por el Banco de Santander en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo. Francisco Luzón, consejero y presidente para América de la entidad bancaria, sostuvo durante la clausura que es "optimista" respecto al futuro inmediato de la región. El principal factor para explicar ese optimismo es el "sistema financiero excepcional" del que goza la región en comparación con otras zonas emergentes.

Luzón recordó que durante el "quinquenio mágico" (2003-2008), algunos grandes países, como México, Chile o Brasil, lograron una importante estabilización de sus cuentas públicas, lo que ha supuesto "acumular un margen de maniobra" frente a la crisis. Ese margen ha evitado, según explicó, que en esta ocasión se hayan disparado la inflación, el déficit exterior, la prima de riesgo o el deterioro del tipo de cambio hasta los niveles de crisis anteriores. Además, Luzón celebró que los ciudadanos estén "refrendando" a los gobiernos impulsores de esas medidas estabilizadoras. En síntesis, el consejero cree que el subcontinente "empieza a entrar en la normalidad y a resultar predecible, lo que es fundamental desde el punto de vista económico". A su juicio, la destrucción de empleo de la crisis actual resultará "asumible y limitada en el tiempo", ya que el banco espera que el paro empiece a remitir en 2010.

En el foro participó el ex director gerente del FMI Rodrigo Rato, quien indicó que la inclusión de países emergentes (entre ellos, varios latinoamericanos) en las reuniones que han buscado salidas globales a la crisis supone una buena noticia para la gobernanza global.

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Rato recordó que en la cumbre del G-20 de Londres se acordó una inyección financiera hacia esos países, para tratar de compensar la caída de los flujos internacionales. Aun así, advirtió a los gobiernos latinoamericanos de que ese retroceso de los capitales es una realidad, por lo que les instó a adoptar reformas de mercados que eleven la capacidad de financiación interna y sean más atractivos para las inversiones extranjeras. A su juicio, la comparación con la llegada de flujos a los países emergentes del sureste asiático demuestra que esa capacidad de atracción está siendo limitada.

Por su parte, el ex secretario de Hacienda de México Francisco Gil repasó la situación de su país, valorando los avances conseguidos en los últimos años. Sin embargo, advirtió del impacto de la gripe porcina sobre el turismo, del que ya ha drenado 83.000 empleos sólo en abril. La economía mexicana también está sufriendo la caída de precios de las materias primas, con un descenso del 61% en las exportaciones petrolíferas.

En cambio, la depreciación del peso ha logrado que el valor real de las remesas aumentase un 9% respecto a los cuatro primeros meses de 2008, pese a que el valor nominal en dólares descendiese un 19%. Gil llamó a la necesidad de introducir reformas en el sistema laboral, fiscal, energético y ferroviario.

IPC bajo control y socios comerciales

El secretario general Iberoamericano, Enrique V. Iglesias, presentó ayer en Madrid el Anuario Latinoamericano elaborado por el Centro de Estudios Latinoamericanos de la Universidad Autónoma de Madrid, que recoge la situación económica, social y política de América Latina.Iglesias afirmó que salir de la crisis más grave que se conoce desde la Depresión de los años 30 implica un cambio "en las ecuaciones productivas de los modelos de negocio". Una situación que producirá "grandes desequilibrios en el desempleo". Sin embargo, Iglesias aseguró que Latinoamérica, a diferencia de crisis anteriores, cuenta con administraciones más eficientes que mantienen la inflación bajo control, nuevos socios comerciales (países asiáticos y China en particular), ausencia de crisis bancaria y mayor atractivo hacia la inversión extranjera directa. Iglesias mencionó alguno de los problemas pendientes: la democracia no acaba de decantarse en Latinoamérica lo que da lugar a sorpresas como el reciente golpe de Estado en Honduras. El secretario general señaló que, no obstante, la diplomacia gana terreno de la mano de organizaciones como la OEA y se mostró confiado en alcanzar una solución diplomática a la crisis política en el país.

Cifras

Estimaciones de la cepal para 2009- PIB La Comisión cuenta con una caída del 1,7% este año. La cifra será revisada el 15 de julio.- Comercio El organismo estima que la crisis económica ha reducido los intercambios comerciales entre el 9% y el 11%.- Deuda exterior La región cuenta con un endeudamiento del 8%, lejos del 24% de hace 7 años.

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