Ford insiste en eliminar con carácter definitivo cerca de 1.000 empleos en Almussafes
Fin de las contemplaciones. Ford ha decidido abandonar la vía de los ERE temporales. La dirección de Almussafes comunicó ayer que estudia fórmulas para terminar para siempre con el tercer turno, lo que podría afectar a unos 1.000 empleos.
La dirección de la planta de Ford en Almussafes (Valencia) comunicó ayer al comité de empresa que está estudiando fórmulas para reducir de forma definitiva la plantilla. El anuncio supone un cambio en la estrategia de la multinacional que, hasta la fecha, ha optado por expedientes de regulación de empleo temporales para adecuar la capacidad de producción a la demanda.
La decisión obedece, según el comunicado enviado a los sindicatos, a que "las condiciones deprimidas de los mercados y las demandas futuras esperadas, que hacen prever que la factoría de Valencia no vuelva a los tres turnos completos de producción".
Aunque de momento no se ha fijado la cifra de posibles afectados por esta reducción, la desaparición del turno de noche supone una pérdida de unos mil empleados, tal y como sucedió en el ERE temporal aprobado hace unos meses.
Esa reducción de empleo estaba programada hasta final de este año. Sin embargo, la mejora de la demanda en las últimas semanas ha llevado a la compañía a volver a recuperar a más de 700 de los afectados.
Esta situación llevó a la Dirección General de Trabajo de la Generalitat Valenciana a reducir el impacto del ERE hasta un máximo de 294 trabajadores. La respuesta de la multinacional a esta decisión, tomada el lunes, ha sido el anuncio de convertir en definitivos los despidos que hasta ahora eran temporales. La planta de Almussafes ronda los 7.000 empleados.
El anuncio de reducir esta cifra coincidió en el tiempo con la adjudicación ya prevista del nuevo C-Max a la planta valenciana. Tal y como se anunció hace unos meses, Almussafes fabricará en exclusiva para Europa este modelo.
Adiós al Focus
Pero la noticia vino acompañada de dos detalles importantes. Por un lado, no se adjudica la producción del C-Max para todo el mundo, como se apuntó inicialmente. Sólo para Europa y "potencialmente para otros mercados".
La segunda mala noticia es que el Focus se va totalmente a Saarlouis (Alemania). Cuando se apuntó la nueva estructura de producción de la multinacional hace unos meses, se dejó caer la posibilidad de que Almussafes no perdiese totalmente el Focus y que fabricase puntas de demanda o alguna versión. Sin embargo, en la nota enviada ayer se deja claro que no será así. "Aunque también contemplábamos una segunda planta de producción, finalmente y por motivos estratégicos la nueva generación del Focus se concentrará en Saarlouis", señaló Ford.
El Focus ha sido el gran éxito de la multinacional del óvalo en los últimos años. Su liderazgo en ventas en su segmento lo hacían muy atractivo para las plantas de l multinacional por su impacto en el empleo.
Dos horas más de trabajo, pero menos unidades
La adjudicación del C-Max introduce variables contradictorias para el futuro de la plantilla de Almussafes. Por un lado, el modelo es más complejo que el Focus, lo que requiere dos horas más de trabajo por cada unidad, pero no es un coche del que vaya a tener tanta demanda. Todo esto unido a una situación de crisis, apunta a la decisión de la multinacional de reducir de forma definitiva la mano de obra con la que cuenta en las líneas de producción de Valencia.El anuncio, una vez más, mostró la división sindical que existe en la factoría. Mientras que UGT, sindicato mayoritario, asumió la necesidad de reducir la plantilla y abogó por medidas no traumáticas, CC OO y CGT se mostraron más duros con la decisión de la multinacional. Las próximas semanas serán clave para el futuro de la planta.