La caída de la demanda y el petróleo llevan al 1% el descenso anual del IPC
El dato preliminar del IPC armonizado del mes de junio continúa la senda descendente de los diez últimos meses, según la estimación publicada ayer por el INE. La inflación experimentó una caída interanual desde el -0,9% de mayo al -1%, un nuevo mínimo histórico, debido fundamentalmente a la fuerte oscilación que ha sufrido el precio del crudo en el último año.
"Sabíamos desde hace algún tiempo que el efecto del petróleo iba a dar lugar a evoluciones negativas del IPC, pero en el otoño vamos a ver cómo vuelve a cero y a tasas moderadas pero positivas", expuso ayer el secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña.
El precio del barril de Brent ha pasado de costar 133,74 dólares en junio del pasado año a los actuales 69,15 dólares. Esta diferencia de costes es la principal responsable de que el indicador marque su cuarto mes consecutivo con resultados negativos. A los efectos comparativos del precio del crudo, hay que sumarle la fuerte caída del consumo de los hogares que ha experimentado la economía como consecuencia de la crisis. Ocaña descartó, sin embargo, la posibilidad de incurrir en deflación, lo que el FMI define como un crecimiento negativo de los precios durante dos o más trimestres.
Por su parte, la Fundación de Cajas de Ahorros (Funcas) coincide con la previsión del responsable de Hacienda, al estimar que en noviembre los precios volverán a marcar una tasa de crecimiento positiva que cifran en el 0,4%.
En cuanto al IPC general -no armonizado con el resto de países de la zona euro-, Funcas estima que se situará en el -1,1% de descenso interanual. De confirmarse -el dato se hará público el próximo 10 de julio- sería un nuevo mínimo histórico desde 1947, cuando comenzó a registrarse la serie.
El informe de las cajas también niega la posibilidad de entrar en deflación, argumentando que la reducción de precios se circunscribe a alimentos y algunos bienes industriales. El pronóstico de Funcas es que la inflación se situará en el 1,1% al cierre de 2009 y seguirá creciendo durante 2010, hasta situarse en el 1,9%.
Las ventas de los comercios bajan un 7,8%
El comercio minorista ha experimentado en mayo una disminución del 7,8% con respecto al mismo mes del año anterior. Se trata de la decimotercera caída consecutiva registrada, medida a precios constantes. Sin contar las estaciones de servicio, el descenso fue mayor en los productos no alimenticios, cuyas ventas se redujeron un 6,8%, frente a los comestibles, que lo hicieron en un 6,5%. El peor dato lo presentan los equipos para el hogar, cuyas adquisiciones se desplomaron un 22,5%. En cuanto al empleo generado por los comercios minoristas, este sufrió un retroceso anual del 4,6%. Pese a los resultados negativos, el índice estabiliza su tendencia bajista desde febrero, cuando rondaba el -12%.