Porcelanas Bidasoa cierra tras 75 años de actividad con una deuda de 15 millones
La empresa guipuzcoana Porcelanas Bidasoa ha cerrado tras 75 años de actividad debido a la deuda acumulada en la última década, que supera los 15 millones de euros, aunque los sindicatos también ven tras esta decisión una importante operación urbanística.
Todas las miradas se centran en el acuerdo firmado entre el Ayuntamiento de Irún y la dirección de la empresa en el año 2006, que preveía la recalificación de los actuales terrenos de Porcelanas Bidasoa para que tuvieran uso residencial, lo que permitiría a la empresa saldar su deuda.
Además de solventar los problemas económicos por los que atravesaba, las plusvalías obtenidas con este proyecto, que planteaba la construcción de 400 viviendas, permitiría a Porcelanas Bidasoa trasladar su actividad al nuevo polígono de Araso, ubicado también en Irún.
El único condicionante que se puso a la dirección era mantener los 116 puestos de trabajo de aquel momento, lo que se incumplió un año después con un ERE que dejó en la calle a 60 empleados, a los que se suma ahora el despedido de los últimos 47 trabajadores ante la imposibilidad de seguir con el negocio.
Hay que recordar que en sus 75 años de historia, Porcelanas Bidasoa ha constituido un importante referente en la fabricación de vajillas de alto valor añadido, para lo que llegó a contar con diseños de Picasso y Dalí, además de Mariscal años después o de Andrés Nagel, con el que mantiene un contencioso después de que el artista denunciara un presunto plagio