Méndez critica a Trichet y avisa que con sus medidas se va "a la debacle"
El secretario general de UGT, Cándido Méndez, advirtió hoy de que reformar la contratación, abaratar el despido y reducir salarios, recetas defendidas por el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean Claude Trichet, no hará que España salga de la crisis. "Ese no es el camino, en absoluto. Ese es el camino de la debacle", avisó el dirigente sindical.
Méndez, en declaraciones a Onda Cero, no se mostró sorprendido de que Trichet haya apostado por las mismas cosas que el gobernador del Banco de España, Miguel Angel Fernández Ordóñez, pues ambos forman parte de la misma institución, la autoridad monetaria europea.
"Lo sorprendente hubiera sido que el presidente del BCE hubiera dicho cosas distintas al gobernador del Banco de España", ironizó Méndez, que insistió en que su sindicato no está de acuerdo con ninguno de los dos.
El líder de UGT aseguró que España es uno de los países de la UE donde más reformas laborales se han hecho, aunque no en todos los casos se han dado los resultados esperados o deseados. En este punto, Méndez recordó que en 1994, el Gobierno socialista impulsó una reforma laboral "de mucho calado", que no evitó que se perdieran cientos de miles de empleos fijos en España.
"Creo que aquellos que apuestan por el inmovilismo son los que vuelven a sacar una receta que se ha comprobado como fracasada, que es la receta de la reforma laboral para abaratar el despido y reducir salarios", criticó el dirigente sindical.
Méndez señaló además que aquellos que hablan de abaratar el despido, y reducir salarios y contratos, "lo que quieren es pasar página en relación con el origen de la crisis, que es de carácter financiero, no laboral. "Me parece lamentable que se intente tender un tupido velo sobre el origen de la crisis", agregó.
Confianza en un acuerdo para antes de agosto
En relación con la situación del diálogo social, el secretario general de UGT reconoció que la negociación está siendo "muy difícil" por las diferencias que separan a sindicatos y empresarios, pero aún así confió en que antes de que llegue agosto se pueda cerrar un acuerdo.
"Sería desacertado, erróneo y muy doloroso tomar medidas que agravarían la situación de la economía española. En España hay observadores del diálogo social que consideran que el proceso debería reducirse estrictamente a una reforma laboral para abaratar el despido, modificar las normas de contratación o reducir salarios. Ese es el camino de la debacle", insistió Méndez.
En su opinión, el camino a seguir pasa por proteger a los parados, frenar la destrucción de empleo y trabajar en el cambio del modelo productivo. Según declaró Méndez, los sindicatos saben que sí hay reformas que se deben hacer, pero precisó que éstas tienen que ver con la vida interna de las empresas, lo que se llama flexibilidad interna (organización del trabajo, horarios, etc.).
Preguntado por su relación con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, Méndez lamentó que se están difundiendo falsedades sobre este tema, pues incluso una revista económica ha afirmado que tanto él como su familia visitan con asiduidad el Palacio de La Moncloa. "Es absurdo y no tiene ningún fundamento. Si se quiere criticar y atacar a los sindicatos, que no se utilicen falsedades y acusaciones absolutamente absurdas", comentó.
En cuanto a la caída del 26,6% que ha experimentado el superávit de la Seguridad Social hasta mayo, el dirigente sindical lo consideró un dato lógico, habida cuenta de que la pérdida de empleo repercute inmediatamente en las cuentas de la Seguridad Social.
No obstante, hizo hincapié en que la Seguridad Social sigue en superávit y que se están comparando los datos de este año con los de un ejercicio, 2008, que registró un crecimiento del superávit "espectacular".
"En cualquier caso, el sistema de pensiones es muy solvente y sólido y tiene un fondo que garantiza el futuro", subrayó Méndez, que añadió que las pérdidas de los fondos de pensiones privados lo que pone de manifiesto es la importancia de los sistemas públicos.