Movilidad eléctrica
En los últimos años, la mentalidad de la sociedad se ha transformado, haciéndose más sensible ante las desigualdades económicas y sociales y la protección medioambiental. Las empresas están también concienciadas sobre la importancia del medio ambiente y por este motivo invierten cada vez más en políticas de responsabilidad social corporativa.
Dentro de esta tendencia destaca el ámbito de la movilidad sostenible, cuyo objetivo es reducir los impactos nocivos del transporte en el medio ambiente. La movilidad eléctrica consiste en el uso de vehículos eléctricos e híbridos y es la rama con mayores perspectivas de crecimiento por su eficiencia económica y la disponibilidad de su tecnología.
La movilidad eléctrica ofrece grandes ventajas tanto para las empresas como para los clientes, además de para los propios empleados.
Los vehículos eléctricos son una herramienta extraordinaria para las empresas, ya que les permite reforzar su compromiso con las políticas de responsabilidad social corporativa, aportando un valor añadido a su oferta comercial. Además, estos vehículos gozan de grandes prestaciones y calidades, y de mínimos costes de operación: el coste de la recarga oscila entre los 0,4 euros y los 2 euros a los 100 kilómetros, lo que supone un gran ahorro.
Las compañías pueden así ofrecer un producto ecológico que tiene un impacto real y tangible, atractivo para los clientes sensibles a estos aspectos. Asimismo, frente al cliente, la utilización de este servicio supone disponer de un producto diferencial respecto al resto de competidores del sector.
El uso de estos transportes refuerza el sentimiento de pertenencia de los propios empleados, que valoran formar parte de una empresa innovadora y comprometida con la sociedad.
Varias compañías disponen ya de este tipo de vehículos, entre las que se cuentan algunas como Correos, Ferrovial, Hertz, Fedex o Marks & Spencer, y su número es cada vez mayor.
La movilidad eléctrica representa una oportunidad a corto plazo para las empresas innovadoras, pero a medio plazo va a convertirse en un requisito imprescindible, hasta tal punto que las compañías que no hayan incorporado en sus flotas vehículos eléctricos estarán paralizadas por el mercado y los clientes.
Los vehículos eléctricos cuentan cada día con una mayor oferta comercial en nuestro mercado. Los sectores de la distribución, la seguridad y los servicios para las ciudades son los que mayor uso hacen de este sistema que gana adeptos cada día.
José Manuel Caramés. Director de Desarrollo de Negocio de Goinggreen. www.goinggreen.es