El grupo Eolia prevé un año "magnífico" para su negocio de renovables
El grupo español de energías renovables Eolia, que celebra junta general de accionistas mañana, prevé doblar sus ingresos en 2009, situando su cifra de negocio en torno a los 140 millones. La compañía mantiene entre sus planes salir a Bolsa.
Son pocos los directivos que este año dicen prever un incremento de su negocio. Por eso resulta esperanzador oír decir a Miguel Salís, consejero delegado del grupo de energías renovables Eolia, que 2009 "será un año magnífico".
El ejecutivo asegura que Eolia doblará este año sus ingresos (de casi 70 millones en 2008) y recuerda que en el primer trimestre del año la compañía logró un Ebitda de 19,6 millones de euros, "casi tanto como en todo 2007 y un 76% más que en el primer trimestre de 2008". La facturación fue entre enero y marzo de 27,4 millones, un 97% más. "Vamos a doblar prácticamente el tamaño de nuestro negocio este año. En este sector una vez que pones en marcha un activo tienes una seguridad de ingresos, es un negocio de bajo riesgo, por eso sabemos que vamos a crecer de forma significativa". Pero el grupo no tiene beneficios: "La compañía está todavía en fase de inversión, de crecimiento, pero en unos años los tendremos", afirma.
Eolia se ha convertido en apenas tres años en competidor en renovables de los grandes grupos industriales españoles. Miguel Salís, con el apoyo de la firma de banca de inversión N+1, logró convencer a entidades financieras -Bankinter, Sabadell, BBK y Fonditel- y empresarios del sector en participar en la creación de un grupo de energías renovables intercambiando acciones del nuevo grupo por participaciones de sus parques eólicos o plantas fotovoltaicas.
A finales de 2008 Eolia Renovables se convirtió en la cuarta sociedad en España por potencia instalada en parques eólicos, con 141,1 megavatios, por encima de grupos como Gamesa o Acciona. En esas fechas Eolia adquirió el grupo Renerys, dedicado a la promoción y explotación de parques eólicos en Alemania, Francia, Polonia y Portugal. Con esa compra la potencia total de la cartera que Eolia, presente también en México y Portugal, asegura tener en distintos estados de desarrollo asciende a 1.817 megavatios. La energía solar supuso el 35% de su facturación el ejercicio pasado.
Sin necesidad de refinanciar
La compañía celebra mañana junta general de accionistas y en el orden del día figura la admisión a cotización de las acciones de la sociedad. La salida a Bolsa de Eolia es un objetivo declarado por la compañía desde 2007, pero las circunstancias financieras y económicas han desaconsejado hasta ahora la medida.
"En los próximos 12 meses podrían darse las condiciones para salir a Bolsa", comenta Salís que asegura que la cotización en el mercado de las acciones de Eolia no es una condición indispensable para reducir el endeudamiento del grupo energético.
La deuda de la compañía asciende a 931,4 millones de euros. "Toda nuestra deuda es sin recurso, no tenemos un calendario de devolver una cantidad o algo parecido y es deuda que se está pagando con la caja que generan los proyectos", explica.
"Tiene sentido prorrogar la vida útil de Garoña"
El consejero delegado del grupo de energías renovables Eolia, Miguel Salís, considera que la energía nuclear "es absolutamente complementaria" con otros tipos de energía y que debe seguir siendo "un elemento esencial en el mix de generación eléctrica de este país". Sobre el debate abierto en España en torno al cierre o al mantenimiento de la central nuclear de Garoña el ejecutivo opina que lo "que tiene sentido es prorrogar su vida útil, pero es mi opinión personal".Salís considera que la intervención del Gobierno en el sector de renovables "ha sido, con algunos matices, positiva". En España "ha habido desde hace años un marco regulatorio muy favorable que ha permitido que la industria de renovables española sea tan puntera", destaca y considera que las medidas recientes gubernamentales "han sido positivas, elimina incertidumbres". Sobre la posibilidad de desarrollar parques eólicos marinos en España Salís advierte que no tiene sentido "porque el país tiene poca plataforma continental y sería más cara".