El dólar en el mundo posterior a Lehman
Nuño Rodrigo - 09/06/2009
Quizá sea el tema del verano, quizá una serpiente de verano de esas con las que se llenan las páginas de prensa los agostos en los que no estallan las finanzas mundiales. El dólar y su futuro como divisa global. Si el papel del idioma inglés como lingua franca no admite discusión, el del dólar como moneda mundial sí. O eso, o hay demasiadas coincidencias últimamente.
El presidente del China Construction Bank, controlado por el Estado chino, pedía ayer que Estados Unidos emita deuda denominada en yuanes. Dado que China no es el paraíso de la libertad de expresión y que el interfecto tampoco es precisamente un tertuliano -el CCB es el segundo banco del mundo por valor en Bolsa-, cabe pensar que de la visita de Tim Geithner a Pekín han salido, si no compromisos, quizá sí algunas ideas con las que mantener la insana relación de dependencia financiera entre el que gasta más de lo que gana y el que gana más de lo que gasta, pero que presta sus ahorros a su amigo el manirroto. China tiene en sus reservas de divisas casi dos billones de dólares.
La eventual emisión de Treasuries en yuanes tiene dos lecturas: Por un lado será más sencilla la colocación de la deuda al eliminarse -para el inversor chino- el riesgo divisa, pero por otro lado debilita la posición del dólar como el metro de platino iridiado del mundo de las divisas. Durante los últimos meses China ha llegado a acuerdos de divisas con países emergentes como Argentina. Suena, sí, un poco a boutade tipo "el petróleo se acabará en 2038", y de entrada hay que recordar que el yuan no se puede cambiar libremente y los mercados chinos no son suficientemente líquidos.
Por lo demás, la fuerte recuperación del dólar ha coincidido con un sorprendente movimiento de las expectativas; donde hace un mes todo lo que hacía la Fed parecía poco, ahora se piensa que subirá tipos. Excusa perfecta para el trading en divisas y en bonos, que de un tiempo a esta parte ofrecen la volatilidad y las emociones fuertes que la Bolsa ha olvidado.