Las ventas a clientes privados se iniciarán en abril de 2010, aunque desde julio se pueden realizar los pedidos.
Entre las principales características del i-MiEV destacan el tener unas emisiones cero de dióxido de carbono, ya que únicamente utiliza electricidad para su funcionamiento, lo que según la compañía, puede suponer una reducción considerable del coste de uso del automóvil, en función de las tarifas de las compañías eléctricas.
Mitsubishi señaló que este vehículo produce una experiencia de conducción silenciosa, al no contar con un motor de combustión interna. La compañía resaltó que la autonomía máxima de este coche se sitúa en 160 kilómetros, lo que es una cifra "más que suficiente para un coche utilitario de uso urbano".
Este modelo ofrece la posibilidad de cargar la batería eléctrica de tres formas diferentes. La primera de ellas con 200 voltios y durante unas 7 horas para la carga total, la segunda con 100 voltios y una duración de 14 horas y la tercera con 200 voltios en tres fases, con una duración de 30 minutos que recarga el 80% de la batería.