El euro se acerca al máximo anual de 1,4 dólares

El euro rozó ayer el máximo anual situado en 1,4058 dólares. El billete verde ha perdido atractivo al tiempo que los inversores han comenzado a asumir activos de más riesgo como la Bolsa. El mercado, además, está preocupado por un rebrote de la inflación.

La jornada tuvo dos partes para el euro. Una primera, hasta media tarde, donde la cotización estuvo lineal, y una segunda, donde la agitación fue intensa. En un momento pasó de 1,3750 a 1,3919 dólares, cerca del máximo anual intradía situado en 1,4058. El alza coincidió con un repunte de la rentabilidad del bono a 10 años de EE UU, que pasó del 3,192% al 3,361%.

El euro ha dado un salto importante. El 16 de febrero tocó mínimo en 1,2457, nivel que suponía una depreciación del 10,8%. Sin embargo, en el último mes se ha revalorizado casi el 10% y desde que las Bolsas comenzaron a mejorar, a mediados de marzo, el 7,7%.

Los analistas consideran que han sido varios los factores que han contribuido a esta recuperación. "Se ha producido un momento de relajación y con síntomas de mejora primero en el sector financiero, y después en la economía real. Por tanto, esa búsqueda del dólar como activo refugio ha ido desapareciendo", explica José Manuel Pazos, socio director de Omega IGF. Al mismo tiempo, "existe una amenaza inflacionista, donde Estados Unidos tiene más que perder, puesto que ha apostado por la relajación cuantitativa", añade.

La debilidad del dólar se ha producido también por una situación técnica. "Se ha roto el 1,37, que era importante", explica Marian Fernández, responsable de estrategia de Inversis Banco.

Y todo apunta a que el euro seguirá fuerte, al menos en el corto plazo. "La tendencia actual continuará, ya que está claro que la política de Estados Unidos es la de sacrificar el dólar para alcanzar crecimiento, mientras que en Europa no es así", explican desde el Deutsche Bank.

Marian Fernández desvela que ha sido necesario cambiar las perspectivas que tenían para el euro en 2009 tras el desarrollo que ha seguido la crisis. "En noviembre pasado veíamos un euro perdedor sobre el resto de las divisas y un dólar ganador que cerraría el ejercicio entre 1,15 y 1,23. Ahora, la situación económica es mejor en Estados Unidos que en Europa, pero los diferenciales en los tipos ya no son tan fuertes".

José Manuel Pazos sopesa la posibilidad de que el euro avance más allá de los 1,40 dólares si rompe con fuerza el 1,37 y 1,38. Ahora bien, la lógica manda que las Bolsas deberían bajar después del considerable rally al que han asistido. Si esto ocurre, tal y como esperan la mayoría de los analistas, el billete verde podría recuperar posiciones. "Yo creo que estamos asistiendo a una situación temporal. Aún queda mucho por resolver y el dólar puede subir, porque habrá más momentos de preocupación que de tranquilidad", explica.

Hay expertos más extremos, como Luis Benguerel, de Interbrokers, que está convencido de que nada impedirá que el euro alcance los 1,80 dólares este mismo año. "Tienen un problema grave con la economía y esa situación no se arregla en dos días. No sé como mantienen la triple A de solvencia cuando en otros países la han perdido o se ha cuestionado. Para mí, el dólar ha dejado de ser un activo refugio", dice.

"¿Está llegando el final del dólar como una divisa para reservas?"

El debate se ha abierto hace algún tiempo. Y en este sentido, Deutsche Bank, que se pregunta si puede estar llegando el final del dólar como una divisa reserva, afirma que "las grietas sobre el billete vede están claras". Por eso, han decidido mantener posiciones cortas en espera de que el euro cotice a 1,50 en el verano. "Dado que el 60% de la deuda estatal de Estados Unidos la mantienen los extranjeros, principalmente los bancos centrales, la posición del dólar como primera divisa de reservas podría cuestionarse. Las dudas de los bancos centrales se han incrementado, y de forma notable en China", dicen.Luis Benguerel asegura que "con la crisis el pequeño inversor no tiene dinero para comprar deuda, y los extranjeros tienen miedo de hacerlo".