Madrid pagará parcialmente la pérdida derivada de suprimir la deducción por vivienda
La Comunidad de Madrid incrementará en un 20% la deducción autonómica por la compra de vivienda habitual nueva y compensará a los madrileños por cualquier pérdida que sufran por la eliminación o reducción de la deducción en la parte autonómica.
Madrid subirá del 5% al 6% la deducción autonómica por la compra de vivienda habitual nueva, bonificará en un 20% el importe del impuesto de matriculación de vehículos nuevos y suprimirá el Impuesto de Actividades Económicas para ayudar a los sectores más afectados por la crisis. Además, se compromete a asumir las pérdidas que sufran los madrileños por la reducción o eliminación de la deducción por la compra de una vivienda.
Así lo ha anunciado hoy la presidenta regional, Esperanza Aguirre, tras la reunión del Consejo de Gobierno que ha aprobado un anteproyecto de Ley de medidas fiscales donde se contemplan estas tres medidas, cuyo objetivo es "estimular la compra" de automóviles, motocicletas y viviendas nuevas y ayudar a unas 50.000 empresas madrileñas.
De la deducción del 20% en la compra de vivienda se beneficiarán el primer año unos 30.000 madrileños y se calcula que más de un millón lo harán en años sucesivos.
La rebaja del impuesto de matriculación supondrá un ahorro para el comprador de hasta 900 euros y en lo que respecta a la supresión del IAE, la Comunidad calcula que dejará de recaudar unos 35 millones de euros que hasta ahora cobraba a los empresarios por este impuesto.
El PSOE cree que subirán los precios de los pisos
La portavoz de Vivienda del PSOE en el Congreso, Ana María Fuentes Pacheco, aseguró hoy que la decisión de la Comunidad de Madrid de incrementar en un 20% el tramo autonómico en la deducción de compra de vivienda nueva aumentará el precio de las casas y "retrasará" la salida de la crisis, perjudicando a los madrileños.En declaraciones a Europa Press, la diputada socialista aseguró que el anteproyecto de ley anunciado hoy por el Ejecutivo de Esperanza Aguirre busca "ayudar a los promotores y a los que más se benefician de los precios" y contrasta con la "manera de hacer las cosas" del Gobierno central.