Industria prevé que las ayudas suban el 15% la venta de coches

Las anheladas ayudas a la venta de automóviles comenzaron ayer con el optimismo del Gobierno, que prevé que las ventas mejoren en un 15%, tras un el tímido incremento de la afluencia de clientes a los concesionarios registrado ayer.

El Gobierno expresó ayer su convencimiento de que el plan de ayudas anunciado por el presidente José Luis Rodríguez Zapatero el pasado martes durante el debate sobre el estado de la nación logrará detener la sangría de ventas que ha sufrido el mercado español en el último año. El director general de Industria, Jesús Candil, aseguró ayer en declaraciones a la Cadena Ser que las ayudas que ayer entraron en vigor generarán una demanda que permitirá frenar la caída de las ventas en más de un 15%. Ayer, el Gobierno ha decidido ampliar de dos a cinco años la antigüedad los vehículos usados que se pueden acoger a las subvenciones si se entrega uno de más de diez años, informó la patronal de vendedores Ganvam.

"En principio, los fondos disponibles para estas ayudas podrían llegar hasta los 200.000 vehículos", explicó Candil. "Teniendo en cuenta que un buen objetivo de ventas para el año podría ser algo más de un millón de matriculaciones, estamos hablando de un alza superior al 15%".

El Gobierno, de esta manera, es incluso algo más cauto en sus previsiones que el propio sector, que a finales de la semana pasada cifró en un 20% la mejoría que podrían experimentar las ventas.

Y es que las empresas no han aplaudido la medida y han lanzado ofertas que en algunos casos superan largamente los 1.000 euros obligatorios. La primera fue Ford, pero tanto Renault, como Citroën o Peugeot han lanzado descuentos que alcanzan los 6.000 euros por vehículo.

El efecto de estas estrategias y ayudas, eso sí, se hará esperar al menos unos días. Varios concesionarios de las marcas líderes del mercado español (Renault, Ford, Citroën, Seat y Peugeot) aseguraron ayer que apenas se ha registrado un tímido incremento de la afluencia de clientes durante la primera jornada en vigor de las ayudas. Este tipo de planes, no obstante, suele tardar algunos días en arrancar, tal y como se produjo en Alemania.

Mientras tanto, el mercado español prosigue su declive. Las matriculaciones en la primera quincena de mayo se ha reducido el 30,4%, informa Efe. Este retroceso es inferior al de los últimos meses, ya que alcanzaron el 45% de caída. Pero en mayo de 2008 fue el que abrió la crisis del mercado con una caída del 24%.

Requisitos y picaresca

Las comunidades que han anunciado su adhesión al Plan 2000E tienen previsto reunirse esta semana para concretar los requisitos legales para acceder a las ayudas. Todo parece indicar, según asegura el sector, que van a exigir que el comprador resida en la comunidad para poder optar a la subvención con el fin de reducir la picaresca. No obstante, una posibilidad es copiar el modelo navarro, que obliga además a que la compra se efectúe en un concesionario de la región.

En otros casos como el valenciano o el gallego, que cuentan con ayudas propias, habrá que comprobar si son compatibles con las del Gobierno central. Madrid es una excepción, dado que no exige la residencia al comprador.

Cataluña y Murcia replantean su 'no'

Algunas comunidades comienzan a matizar sus negativas. El consejero de Economía de la Generalitat de Cataluña, Antoni Castells, abrió la puerta a estudiar alternativas a la negativa de la semana pasada de complementar las ayudas del Gobierno central, informa Toni Garganté. Castells reconoció que un hipotético incremento de la venta de automóviles puede beneficiar la recaudación vía impuestos. El presidente murciano, Ramón Luis Valcárcel, anunció que su Gobierno "está estudiando" la nueva medida, aunque criticó que no se le tuviese en cuenta. El presidente de la Xunta gallega, Alberto Núñez Feijóo, mantuvo por contra su posición y anunció que destinará seis millones a su plan, con aportaciones que oscilarán entre los 500 y los 1.500 euros. El Gobierno balear aseguró que su Departamento "no tiene presupuesto" para asumir la parte autonómica, lo mismo que las ciudades de Ceuta y Melilla.