El estrés test: resultados positivos
En las últimas semanas los mercados de renta variable no han dejado de subir, en lo que unos piensan que podría ser el fin del mercado bajista y otros un mini-rally alcista en un mercado bajista. Una vez más, y tras haber tenido que gestionar una de las crisis bursátiles más virulenta de los últimos tiempos, nos encontramos ante una tarea igual de difícil que la anterior.
Que el origen de la crisis es financiero no cabe la menor duda. Que la salida pueda empezar por aquí tampoco. De ello ha tomado nota el nuevo Gobierno americano, que ha acometido un plan que parece lógico: proponer una situación extrema y analizar que ocurriría si se produjese, sobre las cuentas de los bancos. Dicho esto, se puede extraer el capital necesario para que los ratios de capital del sector permitan su garantía de supervivencia.
El resultado del test nos otorga un panorama que a priori no es tan malo como se suponía en marzo. Aunque los bancos tendrán que ampliar capital en 74.000 millones de dólares, con el dinero recibido recientemente por el Estado y sus ya realizadas ventas de activos se limita a 20.
Hasta aquí las buenas noticias. Las "malas" pueden llegar en el futuro, ya que el plan se estructura para los dos próximos años. No nos extrañaría que a partir de 2010 volvieran a ser necesarias nuevas ampliaciones. Y no debemos olvidar que el nuevo sector bancario crecerá a tasas inferiores a las que solía hacerlo, lo que no debería permitir que su valor bursátil superara ampliamente su valor en libros.
Los mercados se acercan a su valoración fundamental, lo que no significa que deban caer. De aquí en adelante todas las subidas se realizarán a cargo de un encarecimiento del mismo. Si el ciclo bursátil cambia, puede que estemos vendiendo la piel del oso antes de cazarla.
Juan Luis García Alejo. Director de análisis de Inversis Gestión