La bajada en el IPC ha causado preocupaciones sobre una posible deflación. Sin embargo, la inflación subyacente -que excluye los precios de alimentos y combustibles- subió un 0,3% en abril, con lo que aumentó un 1,9% en un año.
El mayor aumento de precios en el IPC de abril lo marcaron el tabaco, que subió un 9,3%. Si se excluye este rubro, el IPC bajó un 0,1% y la inflación subyacente fue del 0,1%.
Ayer, jueves, el Departamento de Trabajo informó que el índice de precios de productor (IPP) subió un 0,3% en abril, dentro de lo esperado por los analistas.
Si se excluyen los precios de alimentos y combustibles, la inflación subyacente en el IPP fue del 0,1%, también dentro de lo que esperaban los analistas.
En un año el índice de precios de productor ha bajado un 3,7%, la mayor caída en 12 meses desde 1950. En el mismo período la inflación subyacente ha sido del 3,4%.