_
_
_
_
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Société Générale sigue en el túnel

No era el mejor día para un ascenso. Frédéric Oudéa, el consejero delegado de Société Générale, asumió el cargo de presidente el día que tenía que anunciar que una sustancial provisión ha llevado al banco francés a pérdidas de 300 millones de euros en el primer trimestre. Su ascenso también parece una regresión, ya que SocGen está dando marcha atrás en la recientemente decidida separación de las tareas de presidente y consejero delegado. El consejo del banco puede haber perdido una oportunidad para darle una estructura de gobierno más adaptada a los problemáticos tiempos. Y SocGen está todavía en problemas.

Se olvida que la debacle de Kerviel, que costó al banco 5.000 millones de euros el año pasado, y que el nefasto reality show televisivo del antiguo presidente Daniel Bouton convirtieron al banco francés en el chivo expiatorio de todos los pecados de los banqueros. Se ha pasado ya página, pero lo que queda es un banco que conserva una significativa exposición a las monolines y a las CDO, mientras las pérdidas se están incrementando fuertemente en las operaciones al por menor tanto en Francia como internacionalmente.

La división de banca de inversión y corporativa vio reducidos a la mitad los ingresos en el primer trimestre de 2008, con una pérdida neta de más de 400 millones de euros. Más de la mitad de los 1.500 millones de euros de provisiones estaban relacionadas con las monolines. El banco está reduciendo su una vez legendaria división, pero todavía espera más pérdidas.

Mientras tanto, la sombría economía hace que el banco no acelere los beneficios. Las operaciones minoristas, francesa e internacional, suman más de dos tercios de los ingresos del banco, pero juntas aportan sólo 300 millones de euros de beneficio neto en el trimestre. El problema son las altas provisiones.

En Francia, las provisiones de SocGen son dos veces más altas en proporción a los préstamos que las de BNP. Rusia se ha confirmado como la mala sorpresa que el banco se negaba a esperar: las provisiones en la filial Rosbank están cerca de 400 puntos básicos. Teniendo en cuenta el estado de la economía de Rusia, no logrará sin duda mejorar pronto.

SocGen está fuertemente capitalizada tras tomar 1.700 millones de dinero público. Su ratio Tier 1 es más del 9% y el core Tier 1 es del 7%. Pero los mercados pueden mirar hacia delante. Las acciones de SocGen subieron sólo un 16% este año, cuando las de BNP se han disparado casi un 60%.

Pierre Briançon

Archivado En

_
_