En un trimestre de nivel muy bajo de demanda por la recesión mundial y el "parón de la actividad industrial", el grupo facturó 617 millones de euros, un 60,5% menos que un año antes.
La acerera, que en el mes de abril anunció subidas de sus precios base de unos 100 euros por tonelada en Europa y América, dijo que el entorno que hasta ahora había propiciado precios mínimos ha implicado "unos márgenes muy negativos para la industria".
No obstante, destacó que en las últimas semanas han aparecido signos de reactivación en los principales mercados que han favorecido anuncios de subidas de precios.
Añadió que "la estabilidad del níquel en los últimos meses unida al muy bajo nivel de existencias ... nos hace confiar en una recuperación del mercado para el tercer trimestre".