Conductas éticas para la recuperación
Con el paso del tiempo, se está agravando la crisis económica. Asimismo, se hace evidente que hechos como la depresión económica de 1929, las sucesivas debacles económicas, incluso las más recientes y significativas por su carácter continental, como Latinoamérica en 1995 o el sureste de Asia en 1997, no han dejado un patrimonio científico suficiente.
Las diferencias y la falta de consenso de los Gobiernos se deben al amplio abanico de los problemas a que nos enfrentamos. En este artículo se trata de exponer el denominador común de los problemas existentes y sugerir un tratamiento coordinado para mejorar las perspectivas económicas.
La historia de la economía contemporánea muestra que el sistema financiero internacional y, por ende, los sistemas nacionales de los distintos países han sido utilizados con éxito de forma reiterada para beneficio de depredadores financieros a través de ataques concertados contra las economías de distintos países.
Por otro lado, las debacles económicas así planificadas han dejado a la población afectada sumida en la miseria y han promovido una crisis moral y de las conductas éticas en las relaciones económicas en el resto del mundo. De este modo, la ausencia de criterios morales en las últimas dos décadas ha convertido a los artífices de los citados desastres financieros en celebridades, con voz sobre las finanzas y la economía internacional.
A tenor de lo expuesto, es un error atribuir los abusos financieros a las deficiencias de la mano invisible del mercado libre. De hecho, el alcance de la mano invisible del mercado libre es puramente económico y no jurídico. Por tanto, una de las prioridades inmediatas es la articulación de los aspectos de las conductas financieras y su regulación. El objetivo de la regulación de las conductas financieras será reparar y evitar que vuelva a producirse la falta de sincronización entre los intereses de la economía real y las conductas financieras.
En las condiciones actuales, es decir, antes de la regulación de conductas financieras disfuncionales, la inyección de liquidez masiva bajo las actuales condiciones de desconfianza pública e institucional no va funcionar con eficacia. Sin embargo, el tiempo necesario para calibrar el grado necesario de regulación y su eventual legislación superará la inmediatez a la que nos enfrentamos.
Para superar el desfase entre el tiempo disponible y el tiempo necesario, posiblemente se tendrán que acordar declaraciones vinculantes en los foros competentes, en el sentido de que las conductas financieras deben estar gobernadas por principios de consideraciones morales y conductas éticas.
En el actual contexto tecnológico y medioambiental, los paquetes de estimulación económica deberán aplicarse a tecnologías que propicien el equilibrio energético y medioambiental. La recuperación de consideraciones morales y conductas éticas en las interacciones económicas devolverá la efectividad a la mano invisible del mercado libre que, a su vez, ayudará a lograr un impacto positivo de los paquetes de estimulación económica de los Gobiernos, enfocados a proyectos de mayor valor e interés económico y, por ende, humano.
Saeed M. Feyz Mahdavi. Fundador y director de Consultoría Ejecutiva