El Banco de España pide cambios normativos en favor de las pequeñas empresas
La actual regulación podría estar afectando de forma más negativa a las pequeñas empresas -menos de 10 empleados- que a las grandes, pese a que son las que más empleo neto generan, según advierte el último 'Boletín Económico' del Banco de España, que insta, por ello, a crear un "marco normativo adecuado".
En un artículo sobre la creación de empleo de las empresas pequeñas, el banco emisor concreta que su acceso a la financiación puede resultar en ocasiones más complicado que en el caso de las sociedades de mayor tamaño.
Además, precisa que las pequeñas empresas soportan costes administrativos por empleado "significativamente más elevados" y no suelen contar con convenios colectivos propios, con lo que "deben cumplir con lo firmado en los convenios sectoriales, que pueden no tener en cuenta sus características y su situación específica".
"Estos y otros aspectos son, de hecho, los que han justificado la articulación de medidas de políticas económica en apoyo a la creación y supervivencia de las pymes en España en los últimos años", añade la institución gobernada por Miguel Angel Fernández Ordóñez.
El potencial creador de empleo
El Banco de España también pone en evidencia, a partir del análisis de datos entre los años 1996 y 2003, que las pequeñas empresas crean proporcionalmente más empleo que las grandes y que, aunque es cierto que también presentan mayores niveles de destrucción, su contribución neta de empleo supera a la de las grandes empresas.
En este sentido, observa que el porcentaje de empresas con dos empleados o menos aumentó de forma continua en el sector servicios desde 1996, mientras que en el manufacturero este aumento comenzó de forma más tardía, limitándose a las ramas de la industria con mayor intensidad tecnológica.
En el caso de la construcción, se produjo una polarización hacia un aumento del peso de las pequeñas y las grandes empresas, en detrimento de las medianas.
Finalmente, el Banco de España explica que "a pesar de que España parte de una estructura productiva caracterizada por un tamaño medio de las empresas reducido, éste ha disminuido aún más durante la última fase expansiva del ciclo".