Peligra la paz entre Volkswagen y Porsche
En los mercados se escucha el runrún de que Volkswagen, el fabricante de automóviles alemán opado por su tres veces más pequeño competidor Porsche el año pasado, podría darse la vuelta y adquirir a su depredador. Sea verdadero o no, los rumores están basados en un hecho: Porsche se enfrenta al día del juicio final.
La compañía hizo un viaje excitante el año pasado. Mediante algo de hábil ingeniería financiera, amasó a hurtadillas una participación mayoritaria en Volkswagen, con opciones de acercarse al 75% de los derechos de voto. Es una historia de familia, además de industrial y financiera. Ferdinand Piëch, un miembro de una de las familias que controlan Porsche y el presidente de Volkswagen, hace tiempo que quiere reunir las dos marcas que su abuelo fundó.
El atrevimiento financiero de Porsche le dejó empantanado con 9.000 millones de euros de deuda, sin estar más cerca de lograr acceder a la caja de Volkswagen. Esto es porque el Estado de Baja Sajonia tiene una participación del 20% en Volkswagen, que es bastante, bajo la ley Volkswagen, para bloquear cualquier decisión estratégica. La UE ha interpuesto una demanda para revocar la ley, pero su resolución llevará meses.
Una oferta por VW le costaría a Porsche 13.000 millones, según los analistas. Eso sería demasiado para el balance de la compañía. Por otra parte, la inmovilidad no ayuda al cash flow y mantiene la mano de Baja Sajonia al volante de VW. Los políticos alemanes ya están negociando el mantenimiento de cierta influencia sobre el destino de la compañía.
Veamos el escenario de contraataque, previsto en primer lugar por Credit Suisse: Volkswagen usa sus 8.000 millones netos en efectivo para comprar el negocio automovilístico de Porsche. Esto eliminaría las deudas del holding Porsche SE. Podría mantener su participación en Volkswagen, mientras que los políticos alemanes descansarían tranquilos y seguros de que los directivos que ellos conocen controlan las fábricas de VW.
El problema es que es difícil de ver por qué Volkswagen, la automovilística europea con mejores resultados, se gastaría su efectivo en adquirir -o mejor rescatar- una manufacturera de vehículos de lujo que está peleando por sobrevivir.
Pero todo tiene un precio, incluso la paz entre Porsche y VW. Las operaciones de Porsche relativas a coches se valoran entre 7.000 y 9.000 millones. VW no debería alejarse demasiado de la primera cifra.
Por Pierre Briançon.