Ordóñez sugiere ajustar más la pensión a lo que se ha cotizado
'La reforma del sistema de pensiones en España' es el título del documento elaborado por el Servicio de Estudios del Banco de España que ha sustentado las polémicas declaraciones de su gobernador, Miguel Ángel Fernández Ordóñez. En él se sugieren cuatro líneas de actuación para recortar el gasto en pensiones, que ya han sido aplicadas en otros países de la OCDE.
Reducir la tasa de reemplazamiento. æpermil;sta es la relación entre el sueldo recibido y la pensión que se cobra. En países como Francia, Austria o Suecia este índice se ha recortado más de 10 puntos.
Revalorización estricta de la cuantía de las pensiones. Consiste en que al igual que al superarse el IPC previsto (2%) los pensionistas reciben una compensación, se devuelva el exceso en el caso de que el resultado sea inferior al estimado, como ocurre este año.
Aumentar la edad legal de jubilación, actualmente fijada en 65 años, aunque prolongable. Alemania, entre otros, la han elevado a los 67. El objetivo es garantizar la sostenibilidad futura de las pensiones pese al envejecimiento de la población y la reducción de la natalidad.
Ampliar el periodo que se tiene en cuenta para calcular la cuantía de las pensiones para reducir el coste de las mismas. Mientras en España se hace en función de los últimos 15 años trabajados -en teoría, los de mayores ingresos-, otros países lo han alargado hasta 40 o a toda la vida laboral (lo que reduce el sueldo medio).
Tan sólo una de las medidas propuestas está enfocada al aumento de los ingresos:
Separar las fuentes de financiación de la Seguridad Social para que todo el superávit de las cuentas se destine al Fondo de Reserva, la 'hucha de las pensiones'.