Harvard estudiará cuál ha sido su papel en la crisis
La Escuela de Negocios se aplicará sus métodos de valoración.
La Escuela de Negocios de Harvard, sorprendida por las críticas de que no preparó a sus graduados para hacer frente a un derrumbe económico, analizará su papel en la crisis usando la misma técnica que emplea para examinar corporaciones en dificultades.
Un equipo creado el pasado noviembre por orden del decano está trabajando en el estudio de un caso para decidir si la institución no les ha enseñado a los estudiantes a comprender y manejar el riesgo en el actual clima de deterioro económico, según Paul Healy, copresidente del panel. El método de estudio es el mismo que utiliza Harvard para analizar la toma de decisiones por parte de ejecutivos en tiempos de crisis.
Los 219 profesores de la Escuela de Negocios tratarán el caso en una reunión el próximo 27 de mayo y podrían usar las discusiones para proponer un cambio en el currículo. 'Los pondremos en los asientos de los alumnos', señaló Healy, profesor de Administración de Empresas.
Mientras las autoridades de las facultades de negocios de la Universidad de Stanford y el Instituto Tecnológico de Massachusetts aseguran que han desarrollado clases y proyectos para analizar las causas de la crisis, Harvard usa el colapso financiero como oportunidad para la introspección y la autocrítica. Los profesores deliberarán sobre cómo se ha deteriorado la fama de la institución y podrían debatir artículos que critican a Harvard y a los graduados de la universidad que contribuyeron a desencadenar la crisis financiera.
Entre los graduados de la universidad figuran Stanley O'Neal y John Tain, los ex máximos responsables de Merrill Lynch; Rick Wagoner, el ex jefe ejecutivo de General Motors, recientemente despedido, y Christopher Cox, ex presidente de la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos.
'Estoy seguro de que la marca está dañada a cierto nivel', reconoce Healy, natural de Nueva Zelanda, desde su oficina en Boston. 'Gente que conozco bien me dice en la cara: 'ustedes tienen cierta culpa', y creo que eso es justo. Es un buen momento para que reflexionemos y pensemos en qué debemos hacer'.
Los profesores podrían dedicar la mitad del día a reuniones de grupos de cerca de 90 personas en Aldrich Hall, según Healy, quien añade que los planes no son todavía definitivos. Aldrich Hall, en el centro del campus, fue construido en 1965 con aulas diseñadas para facilitar las discusiones de casos. La última vez que la institución reorganizó sus planes de estudios fue en 2004, cuando añadió un curso obligatorio de ética después del fraude contable de la compañía Enron en 2001.
En 2007, antes de la crisis financiera, la Stanford Graduate School of Business introdujo un plan de estudios destinado a desarrollar el pensamiento crítico sobre liderazgo en clases reducidas, reemplazando las conferencias.
La responsabilidad de los graduados
Si bien Harvard puede tener cierto grado de responsabilidad por decisiones de sus graduados, 'hay mucha culpa que adjudicar en otras partes', señala W. Carl Kester, vicedecano de asuntos académicos. Muchos de los graduados involucrados en las quiebras asistieron a la facultad hace 20 o 30 años, antes de que las clases de gestión de riesgo, macroeconomía y liderazgo fueran obligatorias, recuerda Kester. 'Ha habido cambios en los planes de estudio, y espero que estos influyan en los alumnos que se graduaron en los últimos 5 a 10 años, y en adelante', agregó.Introducido en 1925, el método de casos expone a los estudiantes a los detalles de dilemas enfrentados por los gerentes. A menudo no hay una única respuesta correcta, y los casos se usan para estimular el debate y las discusiones. Una clase puede considerar 25 a 30 casos cada semestre.