El sector financiero británico paga la mitad a las mujeres
Las mujeres ganan como media un 55% menos que sus compañeros varones en puestos de igual responsabilidad en el sector financiero británico, según un informe realizado por la Comisión para la Igualdad y los Derechos Humanos (EHRC), del que se hace eco el diario británico The Guardian.
El informe subraya que la brecha salarial entre trabajadoras y trabajadores del sector financiero en el país anglosajón casi duplica la media de la economía en general, tanto en lo que se refiere a la percepción por hora como anual.
La mayor diferencia, según los autores del estudio, se registra en las denominadas actividades auxiliares, como la gestión de inversiones o los agentes de bolsa, donde la diferencia alcanza un porcentaje del 60%.
Entre los empleados mejor pagados del sector, las mujeres perciben un 45% menos que los hombres, mientras que entre aquellos que perciben salarios más bajos, ellas reciben el 16% menos como media.
Aunque el porcentaje de hombres y mujeres es similar en el sector, estas últimas tienen mayor representación en las tareas administrativas y secretariales y significativamente menor en los puestos de tipo directivo, incluidos aquellos de más alto nivel.
Sólo el 11% de los directivos del sector son mujeres, frente al 28% si se consideran en el análisis todos los sectores de la economía británica en su conjunto, lo que contribuye a una diferencia en los incentivos económicos anuales que se cifra en el 79%.
Por ello, Trevor Phillips, presidente de la Comisión para la Igualdad y los Derechos Humanos, ha pedido que la nueva Ley para la Igualdad, que está pendiente de aprobación en el Reino Unido, incluya medidas eficaces para la reducción de las diferencias salariales entre ambos sexos.
Por su parte, Fawcett Society, organización que promueve la igualdad entre hombres y mujeres, denuncia la discriminación salarial femenina en el sector financiero y reclama que dicha ley establezca marcos salariales transparentes para todas las empresas, que favorezcan la presentación de demandas conjuntas por parte de las trabajadoras en dicha situación, con el fin de acabar con las desigualdades salariales.