Los resultados ponen a prueba el rebote bursátil
Se espera una campaña marcada por una fuerte caída de los beneficios. Una de las grandes incógnitas está en ver las previsiones de las empresas para el año.
Arranca la temporada de resultados. Una dura prueba para unas Bolsas deseosas de prolongar los rebotes conseguidos desde los mínimos pero con cada vez menos munición. Encontrar noticias positivas va a resultar difícil. La campaña se prevé decepcionante. Los efectos de la fuerte desaceleración económica han minado la capacidad de generación de beneficios en todo tipo de sectores y se esperan pocas alegrías. Las sorpresas quizá vengan de las previsiones para los próximos meses aunque está por ver si realmente son algo más optimistas. El mercado agradecerá más visibilidad pero las expectativas de las empresas son una de las grandes incógnitas.
'Los mercados quieren creer que lo peor de la crisis ha pasado ya o está a punto de ser superado, algo que necesitan corroboren los gestores de las principales compañías cotizadas. De no ser así, si los directivos mantienen su discurso referente a la debilidad de la demanda y la falta de argumentos sólidos para hablar de una recuperación de su actividad, las Bolsas pueden volver a sufrir, perdiendo parte de lo ganado en las últimas semanas', explica Juan José Fernández-Figares, director de análisis de Link Securities. A la espera de ver si esta vez las empresas dan pistas y objetivos para este año, algo que no pudieron hacer en la anterior campaña, alegando falta de visibilidad, el consenso espera una fuerte merma de resultados acorde con el entorno económico actual.
Para EE UU las cifras hablan de una caída de beneficios del 36,6% para las empresas del S&P 500 los tres primeros meses del año. Una cifra que contrasta con la caída del 12,5% esperada en enero, según estimaciones de Thomson Reuters. Y es que las revisiones a la baja de los resultados han sido una constante en los últimos meses a medida que se aceleraba el deterioro económico. En cuanto a Europa las cifras tampoco son muy esperanzadoras y se esperan caídas de beneficios del 22% para el Stoxx 600 en el primer trimestre, según datos de Thomson Reuters.
Las expectativas para España este año son algo más pesimistas, si bien es cierto que mientras que en EE UU y en Europa los resultados de 2008 cayeron un 44% y un 27%, en el Ibex la caída fue de sólo el 5% gracias a la solidez de la banca. Así, para este ejercicio las previsiones de consenso recopiladas por Facset hablan de una caída de beneficios del entorno del 12,3% para el Ibex, frente a las caídas del 8,6% anuales estimadas para el S&P 500 o del 8% para Europa. Los expertos temen, además, que los niveles de paro y morosidad generen rebajas adicionales para este año. Y es que desde principios de año las previsiones de beneficios han caído un 7%.
A la espera de ver si los resultados se pueden recuperar en la segunda mitad del año, los inversores ya han tenido la primera lectura de lo que ha sido el comienzo del ejercicio. Alcoa, la multinacional del aluminio que tradicionalmente inaugura la temporada de resultados en EE UU, no aportó buenas noticias esta semana. Presentó pérdidas por segundo trimestre consecutivo -las primeras en un primer trimestre en seis años- que dejó las cifras de ventas y beneficios bastante por debajo de las estimaciones manejadas por el consenso, a pesar de que éstas habían sido revisadas fuertemente a la baja en los últimos meses.
Todo indica que EE UU va camino de encadenar siete trimestres de caídas de resultados, algo que no ha ocurrido nunca desde 1988 cuando se comenzaron a registrar estos datos. La última vez que se produjo un periodo prolongado de mermas de beneficios se dio entre el primer trimestre de 2001 y el primero de 2002, lo que supuso cinco trimestres de caídas.
'Las expectativas más benignas están considerando que la presente recesión se prolongue al menos hasta final de 2009, con lo que se acumularían 25 meses de recesión, duración que sólo superaría la Gran Depresión en los años 30 con una duración de 43 meses. El cambio de tendencia en la caída de los beneficios de las compañías dependerá en gran medida de su capacidad para afrontar el nuevo entorno económico, y no esperamos que se produzca antes del fin de la recesión', explica Patricia García, analista de Banco Urquijo.
Los expertos esperan que en EE UU los resultados tocarán fondo en el tercer trimestre del año para después recuperar en el cuarto. Las estimaciones de Thomson Reuters hablan de un aumento de los beneficios del 169,4% los últimos tres meses del año, algo que dependerá de si se confirma o no la esperada recuperación económica. Y muchos expertos temen que estas expectativas se vean rebajadas en los próximos meses.
'Históricamente la recuperación se produce seis meses después de que la recesión toque fondo. Por ello, si esto ocurre en el tercer trimestre de este año eso sugiere que los resultados tocarán fondo en el primer trimestre de 2010', comenta Andy Lynch, gestor de renta variable de Schroders.
Hay muchas dudas y más aún para Europa donde los efectos de la crisis tardaron algo más en sentirse. 'La restricción crediticia persiste, el desapalancamiento continúa y no esperamos una recuperación sostenida de los resultados hasta 2010. Por eso esperamos que los resultados sigan a la baja a lo largo de este ejercicio aunque a un ritmo menor que el visto en el cuarto trimestre de 2008 o el primero de este año', comenta Tom Beevers, gestor de BNY Mello AM. 'No se puede descartar un escenario aún más complicado pero si vemos recuperación en EE UU en la segunda mitad de este año entonces sí podríamos empezar a ver sorpresas positivas', comenta Manuel Arroyo, director de inversiones de JP Morgan AM en España y Portugal.
Saber cuándo llegará ese punto de inflexión es la gran incógnita, tremendamente ligada a la recuperación económica. En cualquier caso, las fuertes revisiones a la baja de las estimaciones de beneficios quizá dejen algún margen para las sorpresas positivas. 'Es muy factible que muchas empresas batan las estimaciones de los analistas ya que éstos se han curado en salud y han dejado el listón por los suelos', añade Fernández-Figares. 'Mi miedo es lo que digan las empresas sobre el futuro porque dado el espectacular rebote reciente puede decir cosas que frenen las subidas', comenta Lynch, de Schroders.
En cualquier caso los expertos esperan más sorpresas negativas que positivas. 'Los sectores que mayores decepciones nos darán serán los más exportadores, como el industrial, materiales o consumo cíclico. El deterioro del consumo y de la actividad económica se ha agravado en los dos últimos trimestres, y las grandes compañías no gozarán del comodín de los mercados emergentes', añade García, de Banco Urquijo. Sectores con elevados costes fijos y demanda cíclica como la industria o la automoción también se perfilan entre los más afectados. Al tiempo que los expertos esperan que los sectores más defensivos como la sanidad o las telecos muestren más resistencia en sus cuentas. En cuanto al sector financiero y a la vista de las previsiones optimistas que han realizado algunas grandes entidades, los expertos no descartan alguna sorpresa positiva. Al mismo tiempo, la modificación de la norma contable que obligaba a los bancos a valorar los activos a precios de mercado, algo que ya no estarán obligados a hacer, contribuirá a mejorar los resultados del sector.
'Desde el tercer trimestre de 2007 vemos caídas en el sector financiero. Con un efecto base favorable y una ligera mejoría del negocio, como han comentado los propios bancos, seríamos algo más optimistas con el sector', comenta Julián Coca, gestor de Inversis Banco. En España, no obstante, los expertos prevén un deterioro en el sector financiero tras la resistencia que ha mostrado en los últimos meses. En concreto se esperan caídas de resultados del 17% de media este año, según datos de Facset.
El esfuerzo de las compañías para contener costes puede resultar la otra sorpresa positiva si surten más efecto de lo previsto. A la espera de alguna señal de optimismo de las empresas, las Bolsas se enfrentan a varias semanas difíciles y marcadas por la volatilidad.
Factores para ser más optimista
Costes laborales. Las empresas europeas y estadounidenses están inmersas en procesos de reestructuración agresivos. No es descartable que los esfuerzos impliquen unos costes laborales inferiores a lo estimado por los analistas que se reflejen de manera más positiva en los resultados.Gasto en inversión. Las empresas también han recortado drásticamente sus gastos en inversión, otra partida que podría impactar positivamente en los resultados el próximo ejercicio si resulta mayor de lo estimada por los analistas. Goldman Sachs estima que el gasto en inversión caerá un 10% en Europa este año, una cifra que no debería impactar en los resultados. Estos expertos comentan, sin embargo, que si las empresas han sido más agresivas y lo han rebajado al 20%, esto podría suponer un incremento de beneficios del 15% sin incluir al sector financiero en 2010. Algo que combinado con una caída de los costes laborales del 1% resultaría en una mejora de resultados del 25%.Crecimiento de volúmenes. La recuperación económica marcará el ritmo y si resulta más rápida de lo esperado los volúmenes de negocio también pueden mejorar antes de lo previsto. Goldman Sachs estima que crecerán el 1,2% en 2010, pero si realmente aumentaran el 3% eso empujaría los beneficios un 22% sin tener en cuenta al sector financiero.Fijación de precios. Los recortes de producción en muchas fábricas provocarán que una vez mejore la demanda habrá retrasos para ajustar la oferta. Esto puede favorecer la fijación de precios antes de lo previsto, incluso si la demanda es moderada, según Goldman Sachs.
El Ibex en cifras. Empresas mejor y peor posicionadas
AccionaEs la empresa del Ibex para la que se espera un mayor crecimiento de beneficios este año, un 270%, según Factset. Una cifra distorsionada por los ingresos extraordinarios que supuso la salida del capital de Endesa, operación que le reportó unas plusvalías de 1.849 millones de euros.BancaLa banca española ha evitado las pérdidas hasta ahora gracias a su nula exposición a activos tóxicos. Este año se prevé una caída promedio de los beneficios del 17% para los bancos del Ibex. Para Popular se espera la mayor caída, un 30%, mientras que se prevé que BBVA y Santander aguanten mejor con recortes de beneficios del entorno del 13%.GrifolsGrifols es una de las empresas que mejores expectativas tiene para este año. Se prevé que la fabricante de hemoderivados logre incrementar los beneficios un 28% este año. De hecho, los expertos esperan que once empresas del Ibex mejoren sus cuentas. Abertis, Enagás, Gas Natural, Iberdrola Renovables, Indra, Acciona, Mapfre, Red Eléctrica, Técnicas Reunidas y Telefónica, empresas de mayor perfil defensivo, están todas ellas en la lista.