El lanzamiento del misil norcoreano ensombrece la cumbre en Praga
El lanzamiento de un misil o un satélite por Corea del Norte hoy ha ensombrecido la cumbre entre la Unión Europea (UE) y EEUU en Praga, la primera de Barack Obama como presidente y originalmente destinada a intensificar los lazos transatlánticos.
Al término de la reunión, Obama pronunció una breve declaración a la prensa en la que indicó que si Estados Unidos y la UE actúan unidos pueden "marcar la diferencia" no sólo en la relación bilateral sino también en la escena internacional.
Pero el presidente estadounidense utilizó la reunión, en parte, para intentar unificar una reacción de la comunidad internacional ante lo que consideró una "provocación" norcoreana y la probable convocatoria de una sesión extraordinaria del Consejo de Seguridad de la ONU.
Ello dio como resultado un comunicado conjunto en el que tanto la UE como EEUU llamaron a Corea del Norte "a cumplir sus compromisos de abandonar todo programa de armamento nuclear, respetar las normas reconocidas de relaciones internacionales y colaborar para promover la paz y la estabilidad". En cada una de sus intervenciones públicas, Obama hizo hoy mención a Corea del Norte para insistir en que la comunidad internacional emitirá una respuesta "firme".
Así lo afirmó en un encuentro bilateral con los líderes checos, cuyo país es el presidente de turno de la UE. "Esta acción exige una respuesta de la comunidad internacional, incluido el Consejo de Seguridad de la ONU, para demostrar que no se puede desafiar a sus resoluciones con impunidad", dijo Obama.
En un sentido similar se manifestó en una reunión bilateral con el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, antes de comenzar la cumbre con la UE. En esa ocasión afirmó que Corea del Norte tiene el camino abierto para "reintegrarse en la comunidad internacional y salir de su aislamiento", pero agregó que "ése no es el camino que están tomando por el momento" las autoridades de Pyongyang.
