Airbus y Boeing pierden contratos por 5.195 millones desde inicios de año
Los grupos ya contabilizan más cancelaciones que nuevos pedidos Airbus y Boeing ya han visto cómo las aerolíneas han anulado contratos de compra de aviones por valor de 5.195 millones de euros desde enero. En lo que va de año, los fabricantes aeronáuticos acumulan más cancelaciones que nuevos pedidos.
El año 2009 no ha podido empezar peor para Airbus y Boeing, los dos principales fabricantes aeronáuticos del mundo. Sólo en dos meses, sus clientes han anulado contratos de compra de aviones que ya estaban acordados por valor de 6.753 millones de dólares (unos 5.195 millones de euros), según los precios de catálogo. La situación es tal que, en lo que va de año, las cancelaciones superan al número de nuevos encargos.
Por ahora, la más perjudicada es la estadounidense Boeing. Según los datos oficiales facilitados por la propia compañía, desde el 1 de enero y hasta el pasado día 10, sólo había conseguido firmar contratos por 22 nuevas aeronaves, 19 del modelo 737 y tres del modelo 777. Las cancelaciones, sin embargo, ascendían a 32 unidades y todas se concentraban en su nueva apuesta, el 787 Dreamliner. Un avión que acumula un retraso medio en las entregas de 20 meses y que no realizará su primer vuelo hasta el próximo trimestre, tras varios aplazamientos, siempre y cuando se cumpla el último calendario oficial.
La aeronave tiene un precio medio en el catálogo de 178 millones de dólares (136,8 millones de euros), con lo que la decisión de la aerolínea rusa S7 y de la empresa de leasing de Dubai LCAL de anular sus encargos le ha costado a Boeing alrededor de 5.696 millones de dólares (4.382 millones de euros). El ejercicio pasado, los clientes del gigante norteamericano sólo cancelaron siete pedidos.
El impacto económico para Airbus es inferior porque los pedidos anulados son menos (14 aeronaves) y, además, se corresponden a aviones más baratos que los de su rival, todos de su familia de aeronaves de pasillo único: tres unidades del A-318, tres del A-319, cuatro del A-320 y otras cuatro del A-321. Unos encargos valorados, en total, en unos 1.057 millones de dólares (813 millones de euros). A lo largo de todo 2008, Airbus sufrió 123 cancelaciones.
El problema es que el número de nuevos contratos que la filial aeronáutica de EADS ha logrado cerrar en enero y febrero es mínimo. Sólo ha recibido seis pedidos, cuatro por parte de Turkish Airlines para hacerse con unos A-321 y dos por Korean Air para la compra del Superjumbo A-380.
Entregas a buen ritmo
Lo que sí parece que está funcionando mejor son las entregas de los aviones contratados. Un momento clave para las dos empresas, porque es cuando cobran de sus clientes hasta el 70% del valor de los aparatos. Según los datos hechos públicos por las compañías, en los dos primeros meses del año Airbus ha hecho entrega de 76 aeronaves (66 de la familia de aviones de pasillo único y diez de sus modelos de largo alcance). Boeing, por su parte, ha suministrado ya 71 aviones a sus clientes (52 unidades del 737, dos del 747, otros dos del 767 y quince del modelo 777).
Los fabricantes aeronáuticos afrontan, al menos, un par de ejercicios complicados debido tanto a la caída del tráfico aéreo, que está llevando a muchas aerolíneas a replantearse los pedidos de aviones que habían previsto hace unos meses, como a las dificultades de sus clientes para conseguir los créditos necesarios para pagar las aeronaves. Esta situación ha llevado a Airbus y Boeing a ajustar a la baja sus previsiones de nuevos contratos para este año, que sitúan entre las 300 y las 400 unidades, lejos de las cifras récord de 2007, cuando ambas compañías superaron ampliamente los 1.300 nuevos encargos. Pese a todo, las empresas entienden que 2009 no será el peor ejercicio ya que tienen una cartera de pedidos suficiente como para cubrir los huecos que dejen las cancelaciones. Sin embargo, temen que este margen sólo dé juego hasta mediados de 2010.
La cifra
147 es el número de aviones que Airbus y Boeing han conseguido entregar desde el mes de enero.
Alternativas para el A-400M
Francia es el primer país impulsor del A-400M que ha reconocido públicamente que buscará alternativas al avión de transporte militar de Airbus, que ya acumula un retraso de al menos cuatro años sobre el calendario oficial.Así lo adelantó ayer Laurent Collet Billon, el máximo responsable de la DGA, la agencia encargada de la compra de armamento en el país vecino. Según explicó, el organismo baraja la posibilidad de comprar o alquilar otros modelos de aviones para reforzar la flota de viejos Transalls con la que Francia opera en regiones como Afganistán. 'Es una de las alternativas que estamos estudiando. Todavía no hemos terminado de examinar nuestras necesidades concretas, pero esto podría llevar a reducir el número de A-400M que habíamos encargado', precisó, informa Reuters.Francia tenía que haber recibido el primer aparato de Airbus por estas fechas. Uno de los modelos alternativos sería el C-17 de Boeing. Airbus ha ofrecido una versión del A-330 como solución provisional.