La Bolsa cae a niveles de diciembre de 2003
La desconfianza de los inversores se acrecienta. Los últimos detalles del plan de rescate financiero en EE UU resultaron ayer insuficientes para invertir la tendencia bajista y atraer compradores. El Ibex perdió el 0,83% tras navegar en terreno positivo la mayor parte de la sesión, pero Wall Street volvió a marcar la pauta. El S&P bajó un 3,5% y se situó en los niveles más bajos en 12 años. Prueba del recelo dominante es que este año sólo cuatro valores del Ibex, también en mínimos desde 2003, han visto su precio objetivo aumentado por los analistas.
La mañana arrancó bien en Europa y las órdenes de compra dominaban en las mesas de negociación. La sesión prometía un rebote importante tras el descalabro de la semana pasada, pero con el paso de las horas los problemas del sector financiero impidieron la recuperación de los mercados. De poco sirvió el intento de los reguladores de EE UU de tratar de infundir confianza con algunos detalles sobre el plan de estabilización financiera.
Estados Unidos volvió a demostrar ayer que está dispuesto a poner toda la carne en el asador para engrasar al debilitado sector financiero, motor imprescindible de cualquier economía. 'El gobierno se asegurará que los bancos tienen el capital y la liquidez para facilitar el crédito necesario para restaurar el crecimiento económico', aseguraron ayer en un comunicado conjunto el Departamento del Tesoro, la Reserva Federal y otras tres agencias estatales. Los reguladores explicaron que mañana comenzarán a examinar a las entidades bancarias del país para tratar de cuantificar las necesidades de capital del sector y determinar si se requiere un colchón temporal adicional. A su vez, los reguladores insistieron en que 'la economía funciona mejor cuando las instituciones financieras están bien gestionadas en el sector privado', lo que les llevó a reiterar que el programa de ayudas presume que los bancos deben permanecer en manos privadas, al tiempo que reiteraron que no permitirán que ninguna institución 'sistémicamente importante' caiga.
Estas intenciones y promesas convivieron ayer con rumores sobre la nacionalización parcial de Citigroup en una sesión muy volátil que acabó en números rojos. En Europa, los índices cedieron el 1% de media y las mayores caídas correspondieron a la automoción (-5,1%), la industria (-2,11%) y los servicios financieros (-1,88%) en una jornada en la que 17 de los 19 sectores del Stoxx retrocedieron.
El S&P 500 retrocede el 3,5% y se sitúa en mínimos de 12 años
En EE UU, la preocupación por la economía también dominó. El S&P perdió el 3,47% y se sitúa en los niveles más bajos desde 1997. El Dow Jones se dejó el 3,4% y el Nasdaq el 3,71%.
En España el Ibex (-0,83%) concluyó en los 7.540,4 puntos, el mínimo desde diciembre de 2003. Acciona (-6,9%), Cintra (-3,69%) y Gamesa (-3,47%) sufrieron las mayores caídas porcentuales aunque la caída de la gran banca -BBVA perdió el 3,09% y Santander, el 1,63%- restó más de la mitad de los 63 puntos que perdió el Ibex.
El deterioro económico se acelera y la expectativa de una importante merma de los beneficios empresariales marca las decisiones de los inversores. El Ibex acumula ya un castigo del 18% en lo que va de ejercicio, un año en el que tan sólo cuatro empresas del índice han visto una mejora de su precio objetivo por parte del consenso de analistas, según recoge Facset.
ACS se ha convertido en la empresa más agraciada, los analistas calculan que vale 35,69 euros, un 12,4% más que lo que pensaban a finales de 2008. OHL e Iberia han visto sus precios objetivos mejorados este ejercicio (ver cuadro) alrededor del 5%, mientras que Indra es la cuarta. Inditex, por su parte, se mantiene y al menos no ha recibido una rebaja como el resto de valores del índice.