Braulio Medel podría seguir al frente de la caja más allá de 2010 tras la fusión de Unicaja y CCM
La posible fusión por absorción de Unicaja y Caja Castilla-La Mancha (CCM) podría suponer la permanencia del presidente de la caja andaluza, Braulio Medel, al frente de la entidad más allá de inicios de 2010, cuando finalicen sus actuales contratos, según fuentes del sector.
Dichas fuentes explicaron que desde que se constituyó la asamblea general de Unicaja en adaptación a la Ley de Cajas, en el primer trimestre de 2004, se estableció que todas las personas miembros de la asamblea que estuvieran en su segundo mandato debían salir a inicios de 2010, cuando se debe constituir una nueva asamblea.
Las fuentes explicaron que inicialmente estaba prevista esta salida en el primer trimestre de 2007 en el caso de los representantes en la asamblea por el Parlamento andaluz, las entidades fundadoras y el Ayuntamiento, "pero se concedió de forma extraordinaria que aquellos que en ese momento llevaran como consejeros más de un mandato se pudieran volver a presentar hasta el primer trimestre de 2010", mientras que se mantenían en la asamblea los representantes de trabajadores, impositores y otras organizaciones.
Estas fuentes, vinculadas a las entidades financieras, precisaron que ahora en el primer trimestre de 2010 se debe elegir a representantes de los trabajadores, impositores y otras organizaciones, puesto que "corresponde elegirlos", mientras que los representantes por Parlamento, entidad fundadora y ayuntamiento que estuvieran antes de 2004 y cumplen dos mandatos, a aquellos a los que "se les dio tres años de gracia", deben salir de la entidad, lo que supone la salida de "gran parte del consejo de administración, incluido Braulio Medel".
Tras apuntar que en la Ley de Cajas "queda claro que las fusiones no ponen los contadores a cero" en esos plazos, sí precisaron que con la entrada en CCM "el legislador, si le interesa propiciar esa operación, puede establecer una excepción en el caso del presidente y del resto de consejeros". Además, recordaron que esa fusión supondría establecer un período transitorio de dos años "en el que no se ejecutaría el límite de mandato".
Dos años también para los consejeros
De esta forma, según las fuentes, "como mínimo los consejeros se mantendrían dos años más una vez que se aprobara un protocolo en 2009, con el período transitorio", a lo que se une el hecho de que ese protocolo aprobado este mismo año "podría dar pie a los legisladores de paralizar y suspender los procesos de renovación que se tuvieran que acometer mientras que se realizase este proyecto".
"No será lógico que saliera de la entidad la persona que ha gestionado esa entidad durante dos décadas, lo normal sería que siga una vez que se iniciara dicha fusión", consideraron estas fuentes.