Economía da el visto bueno definitivo a la compra de Fenosa por Gas Natural
El vicepresidente económico, Pedro Solbes, ha ratificado la operación de concentración Gas Natural-Fenosa, que la Comisión Nacional de la Competencia autorizó 'con compromisos' la semana pasada. Es la última traba administrativa para que Gas Natural proceda a la transacción de compra de Fenosa: primero, el 35% de ACS y, después, una opa hasta el 100%.
La operación de concentración de Gas Natural y Unión Fenosa fue 'confirmada y validada' ayer por Pedro Solbes. El vicepresidente económico no ha encontrado en la resolución aprobada la semana pasada por la Comisión Nacional de la Competencia (CNC) ningún motivo legal para que la operación deba ser modificada, lo que hubiera obligado a ser sometida al escrutinio del Consejo de Ministros.
Gas Natural recibió la notificación del Ministerio de Economía avanzada la tarde de ayer. Se trataba de una nota escueta en la que se indica que 'en relación con la operación de concentración económica notificada a la Comisión Nacional de la Competencia, consistente en la adquisición por Gas Natural del control exclusivo de Unión Fenosa (...) ha resuelto no elevar la decisión sobre la concentración al Consejo de Ministros', según un comunicado remitido por la gasística a la CNMV.
Esta decisión elimina la última barrera para que la compañía que preside Salvador Gabarró proceda, primero, a la compra del 35% que ACS mantiene en Fenosa (en un plazo de cinco días) y el 5% de la CAM, y para lanzar una opa hasta el 100% restante, a 18,05 euros por acción.
Según fuentes próximas a la compradora, desde principios de febrero ésta mantiene contactos con la CNMV para la elaboración del folleto, proceso que puede durar un mes. El consejero delegado de Gas Natural aseguró recientemente que la oferta se liquidará en abril.
El 10 de marzo hay convocada una junta extraordinaria para aprobar una ampliación de capital de 3.500 millones de euros, que quedan garantizados por los dos principales accionistas de la gasística, La Caixa y Repsol. Por el momento, Caixa Catalunya ya ha anunciado que no acudirá a la ampliación, según aseguró hace unos días su presidente, Narcís Serra, por lo que su actual 3% quedará dilucido en la proporción correspondiente. Por el momento, se desconoce el plazo y las condiciones de la ampliación.
Aunque tampoco el tercer accionista de Gas Natural, GDF Suez, con más de un 8% del capital, ha dado señales sobre su intención de acudir o no a la ampliación, en el mercado consideran que, tanto financiera, como estratégicamente, el grupo franco-belga, le conviene acudir a la misma. Dado el escaso capital flotante de Gas Natural, si algunos inversores nuevos quisieran acudir a la ampliación, deben comprar derechos preferentes, podrían tener dificultades.
Y es que pese al esfuerzo financiero que van a hacer La Caixa, que tiene más de un 37% del capital y Repsol, con un 30,8%, lo cierto es que a ninguno de estos accionistas les interesa diluir su participación por debajo del 30%. Ambos mantienen un pacto parasocial histórico que les permite, sin haber lanzado una opa por el 100%, superar el actual límite que obliga a ello.
Desinversiones
Entre esta semana y la próxima, Gas Natural debe remitir a la CNC un plan para ejecutar el plan de desinversiones a las que se comprometió con este organismo como condición para su autorización. Concretamente, 600.000 puntos de suministro de GAS (y los clientes asociados a dichos puntos) y la venta de 2.000 MW de ciclos combinados.
En el expediente de la concentración publicado por la CNC, una parte del cual es confidencial, estas centrales de gas estarán operativas y con una vida restante no inferior a 10 años. Gas Natural, que se compromete a garantizar el suministro de gas por dos años al comprador de las plantas, se compromete a no permanecer como accionista de los activos ni directa ni indirectamente.
En cuanto a las redes de distribución de gas, la vendedora se compromete a no cederlas a compradores que puedan provocar solapamientos significativos de gas y electricidad.
Subasta de activos
La intención de Gas Natural es subastar los activos a los que se ha comprometido a desprenderse ante la CNC. Por ellos podría obtener unos 1.500 millones de euros para financiar la compra de Unión Fenosa, y cuyas plusvalías estarían exentas por ser desinversiones obligadas por la autoridad.