Solbes respalda a Fernández Ordóñez porque su discurso fue 'malinterpretado'
El vicepresidente del Ejecutivo, Pedro Solbes, defendió ayer con vehemencia al gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, al señalar que las palabras que dijo la semana pasada 'en ningún caso hacían referencia a pedir el despido libre o abaratarlo, sino más bien lo contrario'.
Fernández Ordóñez pronunció una conferencia en Zaragoza en la que reclamó cambios en el mercado laboral, especialmente en el elevado coste del despido 'que reduce la creación de empresas y de contratos'. Esas palabras le valieron la reprobación del presidente del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, y del ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, quienes criticaron que las recetas del gobernador para salir de la crisis se centraran en exclusiva en el mercado laboral y no abordaran el sector financiero.
La postura de Solbes frente a las palabras del gobernador, sin embargo, fue radicalmente diferente. 'El contenido del discurso ha sido malinterpretado por los concisos titulares de la prensa. Corresponden poco y no reflejan bien el documento', recalcó el vicepresidente, quién aseguró que el gobernador no entró a valorar esta medida, sino que hizo 'una serie de propuestas alejadas de posturas simplistas e integradas en un debate sobre una reforma que hay que analizar en profundidad'.
Preguntado por si coincidía con las declaraciones de Fernández Ordóñez, Solbes reiteró que la posición del Gobierno consiste en remitir al diálogo social a la hora de afrontar cualquier reforma laboral, buscando el consenso de los agentes sociales.
Frente a las críticas recibidas, el Banco de España emitió ayer un comunicado en el que niega que el gobernador propusiera suprimir la indemnización por despido. 'El gobernador no está en contra de la indemnización por despido, sino con la forma en la que está diseñada en España', asegura.
La frase textual de Fernández Ordóñez, según la nota, fue: 'Tal y como está diseñada la indemnización por desempleo, se desincentiva la movilidad de los trabajadores entre empresas, ya que la indemnización depende de la antigüedad del trabajador en la última empresa en la que estaba'.