Novedades de mesa y mantel para animar a salir de casa

Vanguardia, tradición o fusión en las recientes aperturas de Madrid y Barcelona.

Parece una osadía en los tiempos que corren, pero lo cierto es que continúan abriéndose restaurantes, y, a priori, con buenas expectativas. De hecho, últimamente se han producido interesantes novedades en Madrid y Barcelona, ciudades en las que a pesar de todo sigue existiendo un público ávido de propuestas diferentes y que está dispuesto a pagar por ello, siempre que se cumplan los niveles de exigencia.

Una de las que más van a dar que hablar es el recién abierto Villa Magna by Eneko Atxa (Castellana, 22. Madrid. Tel.: [phone]). El renovado cinco estrellas madrileño ha contado con un joven cocinero bilbaíno vinculado a la cocina de vanguardia para revitalizar la propuesta gastronómica del hotel.

Propietario del restaurante Azurmendi en Larrabetzu, Vizcaya (con el que posee una estrella Michelin), Eneko Atxa ha destacado en los últimos años por sus revolucionarias técnicas y su rabiosa modernidad, que le han convertido en uno de los chefs más inquietos y personales del País Vasco. Y ahora aterriza en la capital para gestionar un local espacioso y elegante, para lucirse. Desde luego lo consigue. Magnífico producto, técnica irreprochable, platos originales, arriesgados, y sutileza, desde el sabor hasta las presentaciones. Una cocina ligera, que ensalza la materia prima y seduce en sus planteamientos. Con los menús degustación (tarifados a 90 y 115 euros, sin vinos ni IVA) llegan la yema de huevo trufado cocinado a la inversa (le inyecta un caldo caliente de trufa que cocina el huevo desde el interior), los percebes descascarillados con aroma natural de mar, el bacalao asado sobre estofado de sémola, la huerta… Cocina divertida, delicada y a la última. Un nivel altísimo el de Eneko Atxa, que se mantiene desde los aperitivos a los postres, ineludibles.

También en la capital acaba de abrir Asiana Next Door (Travesía de San Mateo, 4. Tel.: [phone]), hermano pequeño de Asiana, con el que se sitúa puerta con puerta. Si aquel es un restaurante de alta cocina de fusión, y precio, éste es una propuesta más cosmopolita e informal en la que Jaime Renedo (artífice de ambos) opta por un menú de 35 euros (vinos e IVA aparte). Influencias peruanas y sabores del sudeste asiático (Tailandia, Malasia, Camboya) pasados por el personal filtro del joven madrileño, que no desdeña mezclar con productos tan nuestros como las carrilleras. Matices dulces, picantes, ácidos, en los mejillones con salsa nam-jeng, el tiradito de corvina, una fusionada cazuela de chupe balinés (una sopa de mariscos que antes que él ha preparado David Muñoz en DiverXo) o el curry verde de carrilleras. El local, moderno y agradable. Una dirección para urbanitas viajados en la que ya resulta imprescindible reservar.

La Ciudad Condal no descansa

Diciembre ha sido un mes de aperturas en la Ciudad Condal. Lo ha hecho Fermín Puig (chef del Drolma) al inaugurar el local Petit Comité (Pasaje de la Concepción, 13. Tel.: [phone]. Precio medio por persona: 50 euros). Cocina catalana de siempre puesta al día, de escudella, de cap i pota con xamfaina, de arroz de payés, en una carta gustosa que recupera la cocina popular, eso sí, en un decorado muy actual. En Indochine (Muntaner, 82. Tel.: [phone]. Con menús entre 45 y 75 euros) Ly Leap se decanta por una cocina del sudeste asiático, pero muy personal.Ligera, auténtica, reinventa los sabores e ingredientes fusionándolos y añadiéndoles complejidad. Los pescados salvajes perfumados con hojas de plátano, el rollo de pato con verduras y curry con mangostán son algunos de los platos que se degustan en un ambiente de gran belleza que en sí mismo es todo un espectáculo.