La moda como terapia para la crisis

La austeridad se ha convertido en un antídoto necesario contra la crisis. El santo y seña: prohibido el derroche y los extras. æpermil;sa es la consigna colectiva que el gasto en ropa y accesorios aqueja desde hace varios meses -la demanda en el mercado español se redujo un 5,8% (en valor) durante 2008, según el Centro de Información Textil y de la Confección (Cityc)-. Pero, más allá de la caída de las ventas, ¿cómo influyen los nubarrones recesivos en la moda? ¿Se limitan los alardes inventivos en favor de un producto más comercial?

'Lejos de transformar nuestros armarios y hacerlos más sombríos, la crisis económica parece que está estimulando la creatividad e innovación, ya que las marcas y diseñadores buscan enganchar la atención de los consumidores'. El análisis de Rosario Chan, editora senior de WGSN (agencia de predicción de tendencias), anuncia que, ante las grises perspectivas y el desánimo generalizado, la moda será un elemento catalizador. 'Las propuestas para la temporada primavera verano 2009 son optimistas, brillantes y descaradas; casi desafiando la crisis', recalca Chan. 'Para el próximo otoño invierno 2010, la opulencia se manifestará en los colores metálicos suaves: dorados champán, platas y cobres bruñidos'. Y la austeridad solamente será un sinónimo de geometría en la confección, telas con caída y estilo casual a la vez que sofisticado.

WGSN imparte seminarios de tendencias dentro del Salón Internacional de Moda de Madrid (SIMM), que se celebra en Ifema hasta el sábado 14 de febrero.