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Beneficios

La gran banca gana un 19,3% menos, la mayor caída desde la crisis de Banesto

Santander, BBVA, La Caixa, Caja Madrid y Banco Popular cerraron el año con un beneficio atribuido de 17.590 millones, con una caída del 19,3%, la mayor desde la crisis de Banesto. Pese a todo, este resultado es muy superior al obtenido por sus rivales internacionales, que acumulan pérdidas.

El pasado ejercicio ha sido definido por el sistema financiero internacional como el peor de la historia. La crisis que se inició en agosto de 2007, y que inicialmente parecía según los expertos pasajera, se recrudeció en septiembre de 2008 con la caída del estadounidense Lehman Brothers. A partir de ahí el desplome de la banca ha sido continúo sin visos, de momento, de salir del túnel al que aún no se le divisa el fondo.

En este escenario, donde la falta de liquidez fue la principal causa, los bancos españoles han logrado salir mejor parados que sus rivales tanto europeos como estadounidenses. Han logrado, de hecho, escalar posiciones en el ranking mundial. Pese a ello, sus beneficios se han visto arrastrados primero por la crisis financiera y ahora por la económica.

Al cierre del año los cinco grupos financieros más importantes de España: Santander, BBVA, La Caixa, Caja Madrid y Popular, obtuvieron un resultados atribuido conjunto de 17.590 millones de euros, un descenso del 19,3% sobre lo registrado 12 meses antes, o lo que es lo mismo, 4.208 millones menos que en el ejercicio precedente -más del resultado alcanzado entre La Caixa, Caja Madrid y Popular-.

Hay que remontarse a la crisis de Banesto en 1993 para obtener una caída del resultado mayor. Ni el desplome de Argentina y Brasil en 2002, que coincidió con una caída de las Bolsas, provocaron una debacle similar. Hace seis años los cinco grandes ganaron 5.779 millones, con un descenso del 15,8%.

Las fuertes provisiones realizadas el pasado ejercicio tras dispararse la morosidad y la necesidad de guardar colchón para este ejercicio, en el que todo apunta que será peor que el precedente, han influido en esta caída del beneficio.

La morosidad del sistema financiera, de hecho, se sitúan por encima del 3,5% (3,18% en noviembre, último dato del Banco de España), y según las previsiones de los directivos del sector este índice puede llegar a elevarse al cierre del presente ejercicio entre el 8% y el 9%. Esta tasa es la misma que la alcanzada entre 1992 y 1993, coincidiendo con una importante crisis económica en España -la presente parece que la superará- y la crisis de Banesto.

El mayor índice de morosidad de estos cinco grupos financieros a falta de Santander que aún no ha dado sus resultados, sólo un avance) lo ha registrado Caja Madrid al situarla en el 4,87% de su cartera crediticia, lo que supone multiplicar por más de cinco la tasa del 0,9% que registraba al cierre de 2007. A continuación está Popular, con una tasa de morosidad del 2,81%, que fue más de tres veces superior a la registrada cierre del ejercicio 2007. La Caixa cerró el año con una mora del 2,48%, cinco veces más alta que la contabilizada un año atrás, cuando se colocó en el 0,55%.

BBVA es el banco con un índice más bajo, al alcanzar el 2,12%, frente al 0,89% de 12 meses antes.

Pese a las fuertes dotaciones y desplome del beneficio, las entidades financieras españolas han salido hasta ahora mejor paradas que sus homólogas internacionales, que en su mayoría han tenido que ser reflotadas con inyecciones de capital público ante sus voluminosas pérdidas. 'En España no tenemos pérdidas, el Banco de España no nos deja ocultarlas', insistió ayer Miguel Martín, presidente de la AEB. Las ayudas de Estado a los bancos en Europa suman ya 320.000 millones de euros.

Pero los banqueros no quieren echar las campanas al vuelo. Y es que saben que 2009 será un ejercicio mucho peor que el anterior. '2008 se caracterizó por una altísima volatilidad y falta de liquidez. Fue la crisis financiera. Ahora es la crisis económica española, con una espectacular aumento del paro y de la morosidad, y con un negocio en declive. Puede ser el ejercicio más complicado de la historia reciente de la banca español', vaticina el presidente de un banco con años de experiencia.

Reducción de costes con cierre de oficinas y reducción de plantilla, menos dividendo, más capitalización y provisiones son las viejas recetas que todos vuelven a manejar ahora.

Las dotaciones, las grandes protagonistas

Los cinco grandes han extremado la prudencia tras las recomendaciones del Banco de España. Han optado por realizar más provisiones de las que las nuevas normas de contabilidad exigen, y se han llevado sus plusvalías a reforzar su solvencia. La Caixa realizó provisiones el pasado año por 1.031 millones, a lo que se suma una dotación extraordinaria de 357 millones. El resultado de Popular refleja una anticipación voluntaria de provisiones por deterioro de activos de 189 millones de euros y no ha utilizado sus provisiones genéricas por 244 millones de euros, pese a estar permitidas por la normativa, aunque ya ha recurrido a esta partida. Santander y BBVA, mientras, han realizado provisiones extra de 302 millones y 500 millones respectivamente por la estafa de Madoff.

Resultado recurrente

El beneficio recurrente -sin extraordinarios-, fue positivo para el conjunto de los cinco grandes. El resultado recurrente de Santander subió un 9,4%, BBVA repitió, La Caixa mejoró un 2%, Popular un 6,4% y Caja Madrid un 5,6%. En total, sumaron 18.648 millones.

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