La operadora y sus socios sanean 1.395 millones en Telecom Italia
La española renegocia su deuda con los bancos
Telefónica y sus socios en Telecom Italia han tenido que enfrentarse a la evidencia. La operadora italiana lleva en caída libre en Bolsa desde mucho antes de que entraran en el capital y el cambio de gestión no ha conseguido frenar el desplome. Desde que la española anunció su desembarco en su rival, las acciones de Telecom Italia han caído un 56%, y la compra se produjo a precios superiores a los de cotización.
El escenario, por tanto, es una contabilidad que no refleja el valor real de las posesiones. Así que Telefónica y sus socios, Intesa Sanpaolo y Generali, entre otros, han decidido sanear las cuentas del holding en el que han integrado su participación del 24,5% en Telecom Italia. Telco, así se llama la entidad, anunció ayer unas pérdidas de 1.499 millones para el semestre fiscal que cerró en octubre. ¿El culpable? El saneamiento de 1.395 millones para reducir el valor de su capital en Telecom Italia. Y sólo ha sido el primer paso.
Fuerte caída en Bolsa
Con la valoración de 'un importante banco de negocios internacional', dice el comunicado de Telco, se ha decidido tasar la participación en Telecom Italia a 2,2 euros por acción. El problema es que la italiana cerró ayer en Bolsa a 0,99 céntimos, así que la necesidad de más saneamientos puede ser inminente.
La pregunta ahora es qué impacto tendrá esta limpieza en las cuentas de Telefónica. Telco es una sociedad no cotizada y las normas de contabilidad no obligan a la española a repercutir el saneamiento. Por eso, la operadora no tiene una decisión tomada. 'Habrá que mirarlo con los auditores', dicen fuentes cercanas a la firma.
La segunda pregunta es a cuánto puede ascender el saneamiento en Telefónica. Con las cuentas matemáticas en la mano, serían más de 800 millones, porque Telefónica compró a 2,82 euros por acción de Telecom Italia. También se podrían calcular 590 millones, el equivalente de la limpieza por su participación del 42,3% en Telco. Pero en sus cuentas el valor en libros es algo menor a los 2,82 euros a los que compró y, además, tendría que contabilizar también las sinergias de su alianza con Telecom Italia, que son 1.300 millones en tres años, de los que a la española le toca el 45%.
Con estos cálculos, la repercusión del saneamiento en los resultados de Telefónica rondaría los 200 millones, siempre que finalmente decidiera acometerlo.
Además de sanear la contabilidad, Telefónica y sus socios decidieron en el consejo de ayer plantar cara al regulador de la Bolsa de Brasil y recurrir la obligación que les ha impuesto de lanzar una opa sobre el porcentaje de la filial de Telecom Italia en el país que no está controlado por la operadora italiana. El regulador considera que la ley así lo exige, pero los afectados creen que se puede pelear.
Además de todo ello, Telefónica está en pleno proceso para renegociar 4.000 millones de un préstamo bancario conseguido para pagar la compra de Cesky Telecom y que incluye parte de los fondos con los que adquirió O2. Como adelantó CincoDías el pasado día 15, Telefónica lleva semanas estudiando una refinanciación millonaria, con emisiones y renegociación de préstamos bancarios. Hace sólo 10 días cerró una colocación de bonos de 2.000 millones y ahora quiere extender el plazo para pagar el crédito, que vence en 2011. La meta es alargarlo dos años más, según han asegurado fuentes bancarias a Bloomberg. Para ello, pagaría 150 puntos básicos sobre el interbancario, frente a los 20 puntos de ahora.