Las empresas del motor podrán aplazar hasta cinco años los pagos a la Seguridad Social
Las empresas del sector automovilístico podrán aplazar hasta un máximo de cinco años el pago de cuotas a la Seguridad Social en función de su situación económica y del importe de la deuda.
Esta es una de las medidas contenidas en el Plan Integral de Automoción, a cuyo borrador ha tenido acceso Efe, y que el Gobierno a través de cinco ministerios (Industria, Trabajo, Ciencia, Fomento y Economía), negocia en la actualidad con los principales agentes sectoriales.
Dicho plan contempla también, respecto a las deudas vigentes, que éstas puedan agruparse en un sólo aplazamiento, pero añade que los aplazamientos solicitados y concedidos devengarán los intereses correspondientes.
En esta apartado de flexibilización de abono de cuotas sociales para empresas en dificultades, el Ministerio de Trabajo e Inmigración apunta que se flexibilizará el criterio de concesión de los aplazamientos sobre cuotas corrientes y se favorecerá la concesión de los mismos.
El Gobierno también planea que la concesión de los aplazamientos generará la suspensión del proceso recaudatorio para que la empresa deudora pueda estar al corriente de sus pagos a la Seguridad Social para no interferir en la obtención de otras subvenciones y bonificaciones.
En el borrador se advierte que esta batería de medidas tendrán un "carácter eminentemente coyuntural y limitado en el tiempo".
En materia de prestaciones por desempleo, el Plan Integral de Automoción señala que el departamento de Celestino Corbacho estudia la posibilidad de ampliar las prestaciones por desempleo y de la cotización al sistema de prevención a aquellos trabajadores con el contrato suspendido por ERE que terminen en situación de extinción contractual.
Esta ampliación de las prestaciones por desempleo, por un periodo de cuatro meses, afectará a las suspensiones de actividad laboral que se produzcan hasta final de este año.
En la reducción de cotizaciones a la Seguridad Social por contingencias profesionales, durante este año se estudia la implantación de un sistema "bonus-malus" con cargo al 80% de los excedentes de la gestión de las mutuas de accidentes de trabajo y enfermedades profesionales.
Para el área productiva del automóvil, Trabajo propone una disminución de los tipos de cotización en más de medio punto, lo que supone una reducción anual en cuotas a la Seguridad Social de 35,5 millones de euros.
Una de las principales preocupaciones del sector automovilístico, como el alto índice de absentismo laboral, busca también soluciones en este plan por medio de un mayor rigor en la concesión de las incapacidades temporales.
Así, se proponen medidas de gestión como la creación en el seno del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) de las subdirecciones generales de gestión de estas incapacidades y de Coordinación de Unidades Médicas.
Como medidas de carácter normativo en este apartado se contempla que se pase "exclusivamente" al INSS el control de todos los procesos de incapacidad a partir del duodécimo mes, así como el impedimento de generar nuevos procesos por iguales o similares patologías cuando el derecho al subsidio se extinga por cumplir su plazo máximo.