Boquiabiertos
Bruselas sigue boquiabierta la lección de carisma, proximidad y sentido de la oportunidad política que está dando Barack Obama en sus primeras 24 horas como nuevo presidente de EE UU. Y las instituciones comunitarias quizá sientan un punto de envidia ante la seductora puesta en escena del nuevo inquilino de la Casa Blanca. Sobre todo, si la comparan con la amenaza de apatía y abstención que se cierne sobre las elecciones al Parlamento europeo del próximo mes de junio. Quizá todavía estén a tiempo de conectar con el electorado aplicando alguna de las recetas Obama, como la trasparencia o el lenguaje inteligible.