El Gobierno admite que las recapitalizaciones bancarias perjudican a las entidades españolas
El vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, admitió hoy que los bancos españoles, a pesar de su solidez, pueden verse perjudicados por las operaciones de recapitalización de las que se han beneficiado entidades de otros países.
Aunque no quiso calificar la situación de competencia desleal, Solbes indicó que, tras las inyecciones de capital a bancos rivales que estaban en peor posición, las entidades españolas -ninguna de las cuales ha necesitado ese tipo de ayuda- han quedado "en una posición menos cómoda".
El vicepresidente recordó que el refuerzo del capital de entidades fundamentalmente sanas, con el objetivo de restaurar la confianza en el sistema financiero e impulsar el crédito, es una de las medidas que los países de la UE decidieron utilizar como respuesta a la crisis financiera.
"Es algo que hemos aceptado todos", subrayó Solbes en una pausa de la reunión del Ecofin (ministros de Finanzas de la UE), pero insistió en que puede tener incidencia en la actividad de los bancos.
Los Veintisiete suscribieron hoy una declaración a este respecto en la que dejan claro que la provisión de fondos públicos a los bancos para superar la actual crisis no tiene por objetivo establecer nuevos requisitos de capital más elevados y recuerdan que el fin último es ayudar a superar la crisis y a mantener el flujo del crédito.
En opinión del ministro, la demanda de más capitalización puede estar generando competencia entre entidades por ostentar una posición más saneada, incluso por encima de las exigencias legales, respecto a su volumen de actividad.
Advirtió de que puede iniciarse "una carrera que no se sabe bien donde termina" y crearse un nuevo problema relacionado con las condiciones de competencia en el sector financiero.
La situación de los bancos va mejorando
Solbes dejó claro, en cualquier caso, que la prioridad en este momento es que el sistema financiero recupere la normalidad y que eso obliga a dejar en segundo plano otros elementos, pero insistió en que "no podemos olvidarlo".
En esta línea, el vicepresidente español señaló que hoy los Veintisiete estuvieron de acuerdo en que, aunque la situación ha mejorado algo en los últimos meses, el mercado de crédito sigue sin funcionar correctamente.
En el caso concreto de España, recordó que el Gobierno está facilitando liquidez a los bancos y animándoles con diversas medidas, como garantías y avales en los préstamos interbancarios, a impulsar el crédito.
Ahora hace falta que "arrimen el hombro como lo está haciendo todo el mundo", señaló.
"Nosotros estamos haciendo un esfuerzo", por lo que también los bancos deben hacerlo, reseñó el vicepresidente, aunque se mostró convencido de que ellos son los primeros interesados en que se normalice el mercado.