Mercedes sólo abrirá ocho días en febrero el centro de Vitoria
La fábrica de vehículos de Mercedes-Benz en Vitoria prácticamente va a encadenar un periodo sin actividad con otro, por la caída de las matriculaciones. El próximo día 20 de enero, el centro reabrirá sus puertas tras mes y medio sin fabricar, pero en febrero la marca ha anunciado que no producirá durante la primera quincena. En la práctica, sólo ensamblará vehículos durante ocho días.
El desplome del mercado automovilístico en España sigue pasando factura a la fábrica de Mercedes-Benz en Vitoria. El día 20 se reincorporarán al trabajo sus más de 3.000 empleados, tras un largo paréntesis de actividad. Entre fiestas de Navidad y paradas de producción por la falta de pedidos, el centro alavés reabrirá tras más de mes y medio de parálisis fabril.
La vuelta de esas vacaciones obligadas no será la ideal. Como la demanda de vehículos sigue en caída libre, acuciada por la crisis económica y el miedo al consumo, los responsables de la filial española ya han comunicado a la plantilla que la fábrica volverá a parar la primera quincena del próximo febrero. De hecho, el centro sólo ensamblará vehículos durante ocho jornadas, los cinco días laborables de la tercera semana y tres de la siguiente. Un ritmo paupérrimo para unas instalaciones capaces de producir 474 unidades al día de la furgoneta Vito y del monovolumen Viano.
ERE de 70 días
Sobre el calendario laboral de la factoría vasca amenazan nuevos recortes. El grupo automovilístico quiere poner en marcha un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) para enviar a casa a 2.800 trabajadores durante 70 días. Dirección y sindicatos negocian hoy esta posible medida anticrisis. La central CC OO propondrá que se amplíe la bolsa de trabajo, una fórmula donde se acumulan jornadas pendientes de realizar, y a las que se recurre, incluso en festivos, cuando hay repuntes de la demanda. Este método evita la aplicación de ERE u otros medidas de regulación. CC OO quiere que esa bolsa admita hasta 25 días pendientes de trabajar.
El centro de Vitoria trabaja en su mayor parte contra pedido (el 70% de los vehículos que salen de sus instalaciones han sido ya encargados por sus futuros conductores, mientras que los concesionarios de la marca asumen el 30% restante). Esta circunstancia da una idea del alcance de la crisis en la industria de las cuatro ruedas.
æpermil;sta no ha sido la única mala noticia para la economía de la región que se ha conocido en los últimos días. Cegasa, que dejará de fabricar sus populares pilas de consumo doméstico por la competencia de los productores asiáticos, anunció ayer su última oferta al comité de empresa. Limitar el impacto de su ERE de 240 a 217 personas. De los despedidos, a 122 se les ofrecerán 30 días por año y otros 95 podrán acogerse a la fórmula de las prejubilaciones. Cegasa ha dado 24 horas de plazo a los sindicatos para que se lo piensen. Si no aceptan este planteamiento, presentarían un ERE para 240 empleados. Por su parte, Sidenor presentará un ERE de 72 días para 2.200 de sus 3.100 empleados. Además, no renovará los contratos de cien trabajadores eventuales. ITP, por su parte, plantea enviar a 100 empleados a casa durante año y medio. El ERE de Tesa afectará a 220 personas.
Paros en la región
La planta vitoriana de Mercedes Benz apenas abrirá ocho días durante el próximo mes de febrero.
Además, el fabricante Cegasa dejará de producir pilas y ha anunciado que pretende limitar el ERE presentado a 217 días, siempre que los sindicatos acepten sus condiciones.
ITP, por su parte, estudia presentar un ERE de un año y medio para 100 empleados.
Seat pide potenciar las ayudas a la compra de vehículos
El presidente de Seat, Erich Schmitt, volvió a reclamar ayer la reimplantación del Plan Prever. El directivo defendió un plan de ayudas directas para incentivar la compra de automóviles similar al presentado esta semana en Alemania, que dará 2.500 euros a las personas que lleven al desguace sus vehículos con una antigüedad mínima de nueve años. Schmitt realizó estas declaraciones tras celebrar un encuentro en Barcelona con el presidente de la Generalitat catalana, José Montilla, y con los miembros del equipo Seat Sport, ganador del Campeonato Mundial de Turismos 2008. Montilla recordó que el objetivo es conseguir que la factoría española sea competitiva para fabricar el futuro Q3 para Audi.