El informe concursal del Levante denuncia el caos legal del fútbol
'De nada sirve la norma si no se cumple ni se hace cumplir'. La reprimenda es para el Consejo Superior de Deportes de parte de los administradores concursales del Levante UD. En el informe sobre la situación del club, se critica que el CSD no haya controlado los excesos económicos de las sociedades anónimas deportivas
El informe de los administradores concursales sobre la situación del Levante UD, en suspensión de pagos desde el pasado mes de julio, arremete sin ambages contra el fútbol profesional en España. En un capítulo del informe que repasa los efectos de la transformación de los clubes, los administradores concursales aseguran que la 'responsabilidad económica' en las nuevas entidades, reclamada por la ley, 'ha brillado por su ausencia'.
Los motivos, según los gestores nombrados por el juez, están en que 'han aparecido personas dispuestas a invertir en los clubes con la intención de obtener beneficios, en unos casos dinerarios, y en otros en forma de promoción personal'. 'La forma de gestionar no ha sido diferente a la que se ejercía antes de la Ley del Deporte, ya que se ha continuado primando el aspecto deportivo sobre el económico, no importando la generación de pérdidas y el creciente endeudamiento'.
Esa forma de gestión, según los administradores, ha estado consentida por parte del Consejo Superior de Deportes (CSD). Y es que las sociedades anónimas deportivas están obligadas a presentar cada seis meses los estados financieros intermedios, las cuentas anuales y las divergencias entre unas y otras. Toda esa información debe dirigirse al CSD, organismo que tiene la posibilidad de someter a las entidades a auditorías complementarias, ya por iniciativa propia o a instancia de la Liga de Fútbol Profesional. 'De poco sirven las normas jurídicas que no se cumplen, o lo que es más grave, que no se exige su cumplimiento por los poderes públicos', lamenta el informe que se pregunta: '¿Qué efectos tiene la norma si una SAD no repite al CSD la información trimestral y la anual a la que le obliga la ley y el organismo público no exige su cumplimiento, o de producirse, no analiza la información remitida?'. 'Si el CSD hubiera exigido a las SAD que remitieran la información y lo que es más importante, se hubiese analizado, fácilmente podrían haberse detectado situaciones de desequilibrios patrimoniales, pérdidas continuadas y endeudamientos en continuo crecimiento, que han hecho que determinados clubes se hayan visto inmersos en insolvencias que han desembocado en solicitud de concurso de acreedores'.
Seguirá a pesar de la quiebra
El Levante UD tiene un déficit patrimonial de 28,59 millones de euros, cantidad que surge de restar los 84 millones de pasivo a los 59,95 de activos. Ante una situación como esta, lo lógico sería liquidar la empresa. Los administradores, en cambio, optan por presentar un plan de viabilidad 'teniendo en cuenta la importancia y arraigo del club en la sociedad valenciana'. Ese plan pasa por la recalificación del suelo del actual campo, la construcción de un nuevo estadio y reequilibrar la cuenta de resultados. La propuesta choca en cierta forma con la crítica que hace el informe sobre las actuaciones de las SAD, ya que ellos mismos recuerdan que uno de los objetivos de la Ley del Deporte era evitar que se recurriese a dinero público para salvar las entidades. En el informe se señala que las SAD han seguido el mismo camino que la ley quería borrar y que ellos piden para el Levante UD.