Responsables de Naftogaz y Gazprom negocian una solución a la crisis antes de ir a Bruselas
El portavoz del consorcio gasístico ruso, Serguéi Kuprianov, informó de que en estas negociaciones los presidentes del Gazprom ruso, Alexéi Miller, y del Naftogaz ucraniano, Oleg Dubina, "examinaron las vías para superar la crisis actual".
A juzgar por este escueto comunicado, el único logro conseguido es el hecho mismo de las negociaciones, pues pese a la crisis, que ha dejado sin suministro de gas ruso a gran parte de Europa, Miller y Dubina no conseguían reunirse desde el año pasado.
Anoche, a iniciativa de la parte ucraniana, se celebró una conversación telefónica de los presidentes de Ucrania, Víctor Yúschenko, y Rusia, Dmitri Medvédev.
"Sin descuentos ni ventajas"
El líder ruso señaló que su país no ha suspendido las negociaciones con Ucrania sobre el suministro de gas ruso, pero insistió en que su precio "debe ser el de mercado, equivalente al del mercado europeo, sin descuentos ni ventajas".
También abogó por crear un mecanismo de control del trasiego de gas ruso hacia Europa por territorio ucraniano con la participación de representantes de las empresa gasísticas de ambos países y también de la Unión Europea y de empresas jurídicas internacionales en representación de los intereses de Gazprom y Naftogaz.
Reproches mutuos
La compañía gasística ucraniana Naftogaz denunció que el consorcio ruso Gazprom suspendió ayer por completo el bombeo de gas a Ucrania para su transporte hacia Europa, lo que la obliga a hacer lo mismo y cortar por completo los envíos a los países europeos.
Por su parte, Gazprom afirmó que fue Ucrania la que cortó por completo el transporte de gas ruso a Europa al cerrar ayer el último de sus cuatro gasoductos, tras hacer lo mismo la víspera con otros tres.
Desde Kiev, el presidente de Naftogaz, Oleg Dubina, explicó que "cerrar el grifo solo es posible desde el lado ruso, Ucrania físicamente no puede cerrarlo y no permitir la entrada de gas ruso".
Dubina subrayó que Moscú suspendió el bombeo sin avisar a Kiev, y Naftogaz se vio obligado a poner sus gasoductos en "régimen autónomo de funcionamiento" y utilizarlos solo para llevar el gas propio de los depósitos a los consumidores ucranianos.
Como resultado, han quedado cortados por completo los suministros de gas ruso por Ucrania con destino a Hungría, Macedonia, Croacia, Bulgaria, Turquía y Grecia, a los que hoy se sumaron Rumanía, Austria, República Checa y Eslovaquia, entre otros países.
El conflicto comenzó el pasado 1 de enero cuando Gazprom cortó el gas a Ucrania tras no alcanzar un acuerdo con Naftogaz sobre su precio en 2009 y la tarifa de tránsito por territorio ucraniano.
El trasiego de gas hacia Europa prosiguió hasta ayer, aunque en volúmenes cada vez menores y en medio de denuncias rusas de que Ucrania "roba" el gas a los consumidores europeos.
El pasado 5 de enero Miller expresó la "confianza" de que Ucrania, que hasta el pasado 31 de diciembre pagaba 179,5 dólares por metro cúbico, aceptará el precio de 450 dólares, pese a que tan solo unos días antes la parte ucraniano calificó de "arbitraria" la tasa de 250 dólares.
Al mismo tiempo, Rusia pretende mantener en los 1,7 dólares de metro cúbico por 100 kilómetros el precio de trasiego de gas ruso por territorio ucraniano.
A juicio de Ucrania, en esas condiciones el precio aceptable por metro cúbico de gas sería de 201 dólares.
En vísperas de la reunión de Bruselas, la presidencia checa de la Unión Europea emplazó a Rusia y Ucrania para que reanuden hoy mismo los suministros de gas a la UE, y advirtió de que en caso contrario se tomarán "medidas más severas".