Estados Unidos abre a otras industrias las ayudas que dará a las automovilísticas
El Departamento del Tesoro de EE UU acaba de abrir la puerta para que un amplio número de industrias se beneficien de las ayudas específicas para el sector del automóvil. El departamento, dirigido por Henry Paulson hasta el próximo día 20, ha publicado las líneas maestras de ese programa de ayudas, según las cuales podrá percibir fondos públicos cualquier empresa que se considere importante para la fabricación o la financiación de automóviles. Eso facilitará el acceso a las ayudas por parte de diversas industrias auxiliares, como las de componentes.
Un comunicado del Tesoro explica que el Gobierno valorará 'si un importante trastorno en la producción de la institución puede tener un efecto materialmente adverso sobre el empleo, y por tanto derivar sus impactos negativos sobre el conjunto de la economía o sobre los mercados de crédito'.
La ausencia de una mayor concreción proporcionará al equipo económico de Barack Obama, que toma posesión el próximo día 20, la posibilidad de decidir qué empresas concretas serán susceptibles de recibir ayudas.
La golpeada industria siderúrgica de EE UU ha lanzado una reclamación al presidente electo, Barack Obama, para que instaure un programa de obras públicas que impulse la alicaída demanda de acero fabricado en el país, según New York Times. Daniel DiMicco, presidente del gigante siderúrgico Nucor, reclama, en nombre de la industria, al próximo Gobierno que 'lidie con la peor depresión económica en nuestra vida mediante un programa que incluya la cláusula compre EE UU'. Desde septiembre, la producción de acero se ha desplomado un 50% a su mínimo desde la década de los ochenta.
Préstamos urgentes
Chrysler ha recibido un préstamo de emergencia inicial de 4.000 millones de dólares por parte del Gobierno de EE UU que 'permitirá a la compañía continuar con una reestructuración ordenada'. General Motors recibió el 31 de diciembre otro préstamo también de 4.000 millones.