Una tendencia moderada, pero con aceleración a final de año

A expensas de imponderables -y éstos suelen ser abundantes en el mercado del petróleo- la previsión es que los precios del barril se mantengan en una senda moderada, a años luz de los niveles vistos en el primer semestre de 2008, e incluso también por debajo de 2007, situándose en una horquilla de 45 a 60 dólares por barril. Los expertos avisan de que las presiones sobre el petróleo volverán en 2010, en el caso de que la economía efectivamente despegue. También está por ver cuál será el impacto del último recorte de producción de la OPEP, en un intento por defender los precios de la materia prima.

Inversiones

El sector precisa de unas inversiones ingentes para remozar sus infraestructuras. Pero el desplome del barril hace peligrar este desembolso. La AIE calcula que será preciso invertir 3,9 billones de euros (cuatro veces el PIB de España) para compensar el rápido declive de los pozos en producción, que descienden a un ritmo del 5% anual.

Costes

Por otra parte, el coste de producción no es homogéneo y hay algunos pozos que al nivel actual no resultan rentables. Lo que esto significa es que, de seguir así, los yacimientos serán clausurados, reduciendo la oferta disponible y, en consecuencia, reanimando la cotización en el futuro. El think tank británico CGES cifra el coste de extracción en seis dólares por barril en Oriente Próximo, cerca de 12 dólares en África, unos 18 en América del Norte y la antigua URSS y unos 40 dólares en la región de Canadá.

Carburantes

Aunque a muchos les cueste creerlo, lo cierto es que los hidrocarburos para el consumidor final también han experimentado un rápido ajuste. La gasolina de 95 octanos ha pasado de 1,27 euros por litro de término medio en julio a un rango ahora de 0,85 euros. El gasóleo A registra una evolución similar, pasando de 1,33 euros por litro a algo más de 0,88.

Inflación

La caída del precio del petróleo ha sido determinante en la evolución del IPC. En España, la tasa de inflación ha pasado de registrar un peligroso 5,3% en julio a situarse en noviembre en el 2,4%, el nivel más bajo desde agosto de 2007.