La CNMV quiere amordazar la difusión de rumores en la Bolsa
En su empeño por garantizar el acceso a una información simétrica para todos los inversores, la CNMV ha hecho público un borrador sobre criterios de actuación 'para la gestión de noticias y rumores' sobre valores cotizados.
Calibrar adecuadamente la información y el impacto de ésta en la cotización de los valores bursátiles. El objetivo que se ha marcado la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) es que los principales agentes del mercado: supervisor, emisores e intermediarios financieros sepan gestionar la información que, sin llegar a constituir un hecho relevante, puede afectar decisivamente a la evolución de un valor y crear distorsiones, 'en las que unos pocos disponen de información relevante que el mercado en su conjunto no conoce'.
Para combatir esta dinámica, el organismo regulador ha hecho público un documento en el que se detallan los 'criterios para la gestión de noticias y rumores difundidos sobre valores cotizados'. El borrador se enmarca dentro de la Iniciativa contra el Abuso de Mercado (ICAM). Un proyecto que inició Manuel Conthe y prosiguió su sucesor, Julio Segura. El texto está sometido a consulta pública y el plazo para remitir comentarios concluye el próximo 30 de enero. Los interesados pueden dirigirse por correo postal a la Departamento de Mercados Secundarios de la CNMV (Serrano, 47; 28001 de Madrid) o por email a ICAM@cnmv.es
El supervisor deja claro que la intención del documento no es 'establecer unas reglas o un protocolo rígido de actuación, sino servir de orientación sobre la pauta de actuación esperable'.
En este sentido, la CNMV recuerda a los emisores que 'tienen un deber legal de vigilancia sobre la cotización de sus valores y sobre las noticias que se difundan sobre los mismos en las fases de estudio o negociación de cualquier operación que pueda influir de manera apreciable en su cotización'.
Lo que el supervisor persigue es que las empresas integren el tratamiento de rumores y el seguimiento de noticias dentro de la Unidad de Cumplimiento Normativo. El clásico recurso de las empresas al 'sin comentarios' parece que tiene los días contados. La CNMV espera reacción 'de forma inmediata' cuando una noticia o rumor contenga una referencia precisa a una información con carácter privilegiado y, por tanto, existan indicios de una filtración.
El objetivo final es concienciar a las compañías de su grado de responsabilidad en la 'difusión oportuna, precisa y completa' de información relevante al mercado.
Decálogo para intermediarios
1 Prohibido originar rumores. Tanto acerca de un emisor de valores cotizados, como de la competencia del mismo.2 Descripción a nivel interno de las características básicas de un rumor, de manera que los empleados puedan identificarlo como tal.3 Procedimiento interno para tener una pauta de actuación ante la llegada de un rumor.4 Limitaciones y exigencia de autorización expresa para la comunicación de un rumor a otros analistas o a potenciales de clientes.5 Intensificación de la interrelación de los departamentos que son proclives a la recepción de rumores con la unidad de cumplimiento normativo.6 Monitorizaciones aleatorias o periódicas de las transacciones y las comunicaciones susceptibles de estar relacionadas con rumores realizadas por los empleados en su actividad habitual, así como un análisis retrospectivo tras movimientos sospechosos en precio y operaciones.7 Revisión y actualización periódicas de la política interna sobre la gestión de rumores, tanto cuando se produzcan cambios normativos, como en épocas de gran volatilidad bursátil.8 Manifestar claramente que es un rumor y, por tanto, una información no contrastada, no oficial, ni de primera mano.9 Comunicar la fuente de la que procede la información o decir expresamente que se desconoce.10 Transmitir la misma información que se ha recibido, sin adornarla de forma que se magnifique el rumor, e incorporar, si procede, la referencia a la información difundida por la CNMV.