Oki lanza en España un plan de ayuda financiera a clientes
Oki ha lanzado en España un plan de ayuda financiera a clientes y canal con el fin de facilitar su situación en el actual escenario de falta de crédito. Además, espera alcanzar unos ingresos de entre 208 y 220 millones de euros este ejercicio, frente a los 204 millones del año anterior.
La dirección del fabricante japonés de impresoras Oki parece tener claro que la actual crisis puede afectar a las operaciones de sus clientes. En una entrevista con CincoDías, Javier Toledo, presidente de Oki en España, Francia, Italia y Portugal, señala que la compañía ha centrado su estrategia en facilitar al usuario final el reemplazo de sus productos o la modificación de sus sistemas de impresión para que no le cueste dinero ni nuevas inversiones. Oki, que en España realiza todas sus ventas a través de canal, ha puesto en marcha 'planes renove en los que recompramos productos a los clientes además de replantearles la forma de trabajar para mejorar el proceso de producción'.
El ejecutivo indica que Oki va a facilitar el acceso a nuevas impresoras de tal manera que los clientes paguen más por el uso que por la compra en sí. 'Además, vamos a estudiar operaciones específicas con proveedores así como darles facilidades de pago y financiación especial para que puedan mantener sus operaciones en este entorno complicado'. Toledo señala que la empresa tiene que amoldarse a esta situación: 'Si un distribuidor sabe que un cliente, como por ejemplo una administración pública, tarda en pagar una serie de días, pues hay que darle ese mismo tiempo al miembro del canal'.
El ejecutivo comenta también que Oki va a dar herramientas de marketing y publicidad a los distribuidores para la promoción de nuevos productos.
La Administración pública aporta el 25% de los ingresos del grupo y el resto viene de las empresas
Pese a este escenario, Toledo señala que Oki alcanzará unos ingresos en España durante este ejercicio fiscal (acabará el 31 de marzo) de entre 208 y 220 millones de euros. 'Dependerá del último trimestre', indica el directivo, quien recuerda que en el año anterior registraron un volumen de negocio de 204 millones.
Toledo precisa que en el primer semestre, que acabó en septiembre, la firma mantuvo un crecimiento del 7% cuando la previsión era no crecer. 'Si tomamos también los meses de octubre y noviembre, que ya han concluido, estaríamos por encima todavía del año pasado entre un 7% y un 10%', si bien reconoce que cada mes que pasa es más difícil hacer una estimación. 'De cara a 2009 sería una temeridad hacer una previsión', señala Toledo, quien apunta que es posible que la situación no vaya a ser tan mala como parecía. 'El hecho de que haya empeorado tanto la economía ha motivado la puesta en marcha de medidas que, de otra manera, no se habrían implantado', apunta.
El ejecutivo señala que en estos momentos la Administración Pública supone entre el 20% y el 25% de los ingresos de Oki en España. 'El resto correspondería al ámbito empresarial, repartido al 50% entre la pyme y la gran cuenta', señala.
En términos operativos, Toledo advierte que la impresión de documentos va a seguir creciendo. 'Se imprime más que hace 15 años', dice el ejecutivo, quien recuerda que, actualmente, entre el 80% y el 90% de la comunicación interior de la empresa es escrita.
Un millón de televisores vendidos
Oki, que en 2008 ha cumplido su decimoquinto aniversario desde que se instaló en España, también ha dado un impulso a otros negocios ajenos a las impresoras, con el objetivo de dar notoriedad a la marca. En la actualidad, las impresoras aportan el 75% de los ingresos del grupo frente al 25% del resto de actividades. Javier Toledo indica que desde 2006 la empresa ha vendido en España más de un millón de televisores planos. 'Si hay tres o cuatro miembros por familia, hay tres o cuatro millones de personas que reconocen nuestra marca', dice. En algunas semanas, 'hemos sido el número dos en ventas de televisores en España, por debajo de Samsung, y en algunos segmentos por debajo de las 32 pulgadas nos hemos llegado a poner en el número uno'. Pese a la guerra de precios que ha planeado sobre el sector, el ejecutivo niega que su compañía haya vendido sus receptores televisivos por debajo de costes para ganar cuota de mercado.Toledo indica también que Oki va a lanzar productos del ámbito de las telecomunicaciones como las centralitas IP. La firma está negociando nuevos acuerdos con operadoras. 'Ya trabajamos con BT y Euskaltel', dice Toledo. Otro de los negocios que Oki busca impulsar en España es el de los equipos de seguridad como los dispositivos de reconocimiento del iris o facial. 'Ahora mismo ya tenemos dispositivos de estas características en el Aeropuerto de Fráncfort', comenta.