Solbes cifra en 38 millones el impacto de la estafa en aseguradoras y fondos de pensiones españoles
El vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, cifró hoy en 38 millones de euros el impacto de la estafa Madoff en aseguradoras y fondos de pensiones en España, y consideró que se trata de una cantidad pequeña en comparación con el dinero que mueve la economía española.
Así lo puso de manifiesto en una rueda de prensa conjunta con el gobernador del Banco de España, Miguel Angel Fernández Ordóñez, y el director gerente del FMI, Dominique Strauss-Kahn, tras celebrar un encuentro en la sede del Banco de España.
Solbes consideró que el impacto en España "no es un tema preocupante" y explicó que de los 38 millones, 2 millones corresponden a las inversiones de un total de tres compañías de seguros y 36 a nueve fondos de pensiones, por lo que representan sólo en 0,04% de la cifra total de los fondos de pensiones.
A su juicio, el impacto de la estafa en España es pequeño porque estas cantidades no representan cifras muy elevadas. En este sentido, consideró que se trata de un nuevo fenómeno que demuestra que el sistema está fallando en algunos países, sobre todo en lo que se refiere a la supervisión y al control que se debe aplicar a ciertas operaciones y que sobre todo daña a la confianza de los agentes económicos en el mismo.
"Es evidente que no es bueno, no ayuda la confianza ni a nivel mundial ni español", indicó Solbes, quien sin embargo no supo cuantificar el impacto de la estafa en los ciudadanos y que sí adelantó que la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) está llevando a cabo una investigación sobre la estafa.
El FMI se sorprende de la estafa
Por su parte, Strauss-Kahn mostró su sorpresa ante la estafa y reiteró en que no se trata sólo de un replanteamiento de las normas del sistema financiero, sino de contar con un sistema que garantice su cumplimiento.
En este sentido, se refirió a un programa de asesoría del sector financiero que no se aplica en EE UU a pesar de que en la reunión del 15 de noviembre en Washington del G-20 se consideró imprescindible a pesar de que no obligó a su cumplimiento.