Caen un 13% las ventas al exterior de principal provincia exportadora china
Las ventas al exterior de la principal provincia dedicada a la exportación de China, Cantón, cayeron en noviembre un 13% interanual, frente a la bajada del 2,2% en todo el país asiático en ese mismo mes, informó hoy en diario China Daily.
El comercio exterior de Cantón cayó hasta los 53.350 millones de dólares (39.588 millones de euros) en noviembre, mientras que en toda China supuso 114.900 millones de dólares (85.269 millones de euros), la primera caída en el país en siete años, en comparación con el 19,2% que crecieron las exportaciones en octubre.
A pesar de la caída de las exportaciones cantonesas en noviembre, analistas citados por el diario señalaron al mercado latinoamericano como el "resquicio de esperanza" para Cantón.
Entre enero y noviembre, las ventas cantonesas a América Latina aumentaron un 24,5%, hasta los 22.230 millones de dólares (16.494 millones de euros), con Brasil como comprador principal.
La provincia de Cantón es una de las más afectadas en China por la reducción de la demanda en Estados Unidos y la Unión Europea, agravada por la actual crisis económica mundial y su entrada en recesión.
Entre enero y septiembre de 2008, 1.327 empresas cerraron, suspendieron su actividad o trasladaron sus fábricas en el área económica del delta del río Perla, y las autoridades de Cantón tuvieron que emplear 5,74 millones de dólares (4,51 millones de euros) para compensar los salarios de más de 10.200 trabajadores despedidos.
A pesar de eso, y del estímulo económico de 11.700 millones de dólares (9.340 millones de euros) que el Gobierno provincial de Cantón ha puesto en marcha para evitar el colapso de su economía, los despidos masivos ya han causado protestas y manifestaciones.
A principios de diciembre, 200 trabajadores de una fundición situada en Cantón bloquearon durante dos horas una autopista en protesta por la pérdida de sus empleos.
Una semana antes, más de 500 trabajadores despedidos de una empresa juguetera de la ciudad de Dongguan, en la misma provincia, asaltaron la sede de la fábrica y destrozaron vehículos policiales.