Bruselas deja la puerta abierta al comercio paralelo de medicamentos
Al final, los temores de los reexportadores de fármacos no se han hecho realidad. La obligación de aportar más información y seguridad a los pacientes no incluye ninguna cláusula que bloquee o impida el comercio paralelo de medicamentos entre Estados miembros de la UE.
La Comisión Europea hizo pública ayer su reforma a la normativa comunitaria sobre la información que aparece en los prospectos de los medicamentos comercializados en Europa y sobre la lucha contra los fármacos falsificados.
Para garantizar la calidad y regularidad de los medicamentos, la CE pretende incluir unas medidas de seguridad para los productos 'que permitan su identificación y diferenciación respecto de los fármacos falsos'. Como ejemplos de estos sistemas, la normativa recoge 'códigos individuales por producto en el embalaje' o 'sellos que revelen si el paquete ha sido abierto'. 'Los detalles sobre estas medidas se fijarán en una regulación complementaria', mantiene la CE.
'Para que estos sistemas de seguridad sean efectivos, es crucial que sólo un fabricante autorizado y certificado pueda imponerlo y que sólo se pueda reponer bajo estrictos controles y requisitos', afirma la CE. Este epígrafe hizo saltar las alarmas entre los reexportadores de medicamentos, al ver que peligraba su negocio.
El comercio paralelo de medicamentos supone que los distribuidores venden en países miembro de la UE medicamentos que compran en otros Estados miembros en los que los productos son más baratos, como España. Si la norma prohibía el reempaquetado de los fármacos, se hacía imposible la inclusión del prospecto en la lengua del consumidor, una condición indispensable para poder vender los fármacos en los países de la UE.
Sin embargo, la norma asegura específicamente que 'estas propuestas garantizan que el reempaquetado de los fármacos es posible'. 'El reempaquetado de fármacos es normalmente necesario para que los medicamentos destinados a un país de la UE se puedan vender en otro país de la UE', afirma la CE, eliminado toda duda sobre la viabilidad de este comercio.
Cada país ha de regular las ventas en la red
La Comisión es consciente, en esta reforma, de que no está proponiendo normas específicas para regular y vigilar el comercio de fármacos a través de internet pese a que 'la Organización Mundial de la Salud estima que el 50% de los medicamentos que se venden por internet, especialmente los que se ofrecen sin ninguna conexión con una farmacia legal, son falsos', según cita la CE en su norma.Sin embargo, la Comisión estima que es 'responsabilidad de cada Estado miembro decidir si quieren permitir o prohibir la venta de medicamentos con receta por internet'. Cada país 'ha tomado diferentes decisiones respecto del tema', así que la CE 'no va a fijar una norma armonizada al respecto'.