_
_
_
_
Laboral

Trabajo quiere que los ERE incluyan planes de recolocación

El Ministerio de Trabajo quiere que los expedientes de regulación de empleo (ERE) incluyan un plan de recolocación para los trabajadores despedidos. 'La idea es hacer estos planes obligatorios', dijo ayer el director general de Trabajo, José Luis Villar.

El Gobierno pretende seguir mejorando la protección de los trabajadores que se queden en paro. En esta ocasión, quiere proponer a los agentes sociales que las empresas que recurran a los expedientes de regulación de empleo para ajustar sus plantillas estén obligadas a diseñar un 'plan social de acompañamiento', lo que comúnmente se conoce como plan de recolocación.

Estos planes, que ya son obligatorios en otros países como Francia, suelen incluir cursos de formación y reciclaje profesional de los trabajadores que van a ser despedidos; así como otro tipo de cursos para enseñarles a elaborar sus currículos o a superar con éxito una entrevista de trabajo.

El director general de Trabajo, José Luis Villar, del departamento que dirige Celestino Corbacho, fue el encargado de anunciar ayer la intención del Gobierno de convertir estos planes de recolocación en obligatorios para todos los ERE.

Según Villar, que intervino ayer en una jornada sobre reestructuración de plantillas organizada por la Asociación del Progreso para la Dirección (APD), Mercer y Creade, los responsables de Trabajo llevarán esta propuesta a la mesa del diálogo social, que será la que negocie en qué términos se establecerá la obligatoriedad de estos planes.

No obstante, fuentes de este Ministerio aseguraron que no será fácil sacar adelante esta iniciativa ya que si estos planes sociales se hicieran obligatorios para todos los ERE habría que regular también las empresas de recolocación, y los sindicatos 'se están mostrando abiertamente reticentes a esta regulación'.

De hecho, fue el propio el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, el que anunció la intención del Gobierno de regular las empresas de recolocación, algo que, de momento, se ha quedado en lista de espera en la negociación del diálogo social, por el rechazo sindical.

En la actualidad, el reglamento que desarrolla el Estatuto de los Trabajadores ya recoge la existencia de estos planes sociales de acompañamiento para empresas de más de cincuenta trabajadores. Si bien en la práctica no se exige su obligatoriedad.

Según Villar, una de las razones para hacer obligatorios estos planes de recolocación es que 'los ERE no se vean por la sociedad como un instrumento para poner en la calle a un montón de gente, sino como un mecanismo útil para reflotar una empresa y fortalecerla'.

El director general de Trabajo recordó, además, que sólo uno de cada diez nuevos parados proviene de un expediente de regulación autorizado. Y añadió que son cada vez más empresas las que, a la hora de hacer un ERE contratan a una empresa de recolocación para los empleados afectados.

En la actualidad existe un vacío legal que permite a estas empresas operar sin regulación específica. Y son las empresas de trabajo temporal las más interesadas en que se acometa esta regulación para reconvertir su actividad en agencias de colocación (que gestionan empleo estable) y recolocación.

La crisis obliga a aceptar empleos peor pagados

El tiempo medio en el que un parado que participa en un programa de recolocación encuentra un empleo oscila entre cinco meses y medio y seis meses, según el tercer informe sobre el sector de estas empresas elaborado por Creade (del grupo Adecco).La crisis ha provocado, según este mismo estudio, que la mitad de los directivos y altos cargos que son recolocados acepten un salario inferior al que tenían en su empleo anterior. Este porcentaje se eleva al 65% en el caso de los trabajadores menos cualificados.El sector servicios es el que más dinero ha invertido en recolocar a sus despedidos de forma individual, pero el sector industrial es el que más programas colectivos de recolocación ha llevado a cabo.La industria está siendo el sector que más acoge a los despedidos menos cualificados, ya que absorbe al 44% de los recolocados que procedían de otras actividades, además de al 51% de los despedidos de su propio sector.

Los parados de la construcción se van a otro sector

El plan de recolocaciones que puso en marcha el Gobierno en el mes de abril empieza a dar sus frutos.Según indicó ayer el ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, un total de 127.197 desempleados procedentes de la construcción han logrado encontrar trabajo en otros sectores de actividad, hasta el mes de octubre.El titular de Trabajo respondió con este dato a sendas preguntas del Grupo Popular en el Congreso, que estimó este número de recolocaciones insuficiente a la vista de que, desde la puesta en marcha del plan, se han sumado unos 600.000 desempleados más.El Plan Extraordinario de Orientación, Formación Profesional e Inserción Laboral, que es como se llama el programa para reubicar a los desempleados en sectores más dinámicos, se diseñó con un coste de 201 millones de euros y dos actuaciones centrales: contratar a 1.500 orientadores y dar una ayuda extraordinaria de 350 euros a los parados con dificultades especiales.Por otra parte, la secretaria general de Empleo, Maravillas Rojo, aseguró ayer que la bonificación para las empresas que creen empleo en sectores emergentes, como el de I+D+i o las energías renovables, 'se aprobará en breve'.Esta medida forma parte de un paquete de cuatro iniciativas para estimular la contratación laboral que presentó el Gobierno a los agentes sociales el pasado 30 de octubre.Dos de esas cuatro medidas, concretamente la bonificación de 1.500 euros para la contratación de parados con cargas familiares y la ampliación del 40% al 60% del porcentaje capitalizable de la prestación por desempleo, se aprobaron en el Consejo de Ministros del 7 de noviembre. Y queda, por tanto, pendiente la regulación de las empresas de recolocación.

Newsletters

Inscríbete para recibir la información económica exclusiva y las noticias financieras más relevantes para ti
¡Apúntate!

Archivado En

_
_